El GEN denuncia que MAB y el Grupo Matutes pretenden abrir una cantera en un paraje protegido

@Noudiari/El Grupo d’Estudis de la Naturalesa (GEN-GOB) ha denunciado hoy en un comunicado que la empresa extractiva del Grupo Matutes, Can Escandell S.L., pretende abrir una nueva cantera en el interior de uno de los parajes naturales protegidos mejor conservados de Ibiza, ubicado en Sant Antoni.

Los ecologistas han denunciado que el expediente, que se está tramitando a instancias de esta empresa, «conformada por el Grupo Matutes y una conocida concesionaria de las autovías de Ibiza, MAB, se encuentra ahora en exposición pública».

Según explican, el expediente en cuestión prevé la apertura de una nueva cantera, que se explotaría durante 35 años en la zona de sa Granada, catalogada como Área Natural de Especial Interés según la Ley de Espacios Naturales (LEN) y como Lugar de Importancia Comunitaria en cumplimiento de la Directiva de Hábitats.

«Según la propia ficha del ANEI y LIC, se trata de uno de los parajes naturales mejor conservados de la isla, lo que recoge la propia evaluación ambiental que se expone al público», añaden los ecologistas.

Cantera fantasma

El GEN asegura que el proyecto que se está tramitando actualmente bajo el título de «Adecuación del Plan de Explotación y Plan de Restauración de la cantera s’Espartar ‘, que afecta a las parcelas 75, 76, 78 y 79 del polígono 20 del municipio de Portmany, y se refiere a unos terrenos forestales «donde no existe ninguna cantera».

«La cantera en cuestión no aparece en el Plan de Canteras de las Islas Baleares de 1999 y únicamente, tras la Ley 10/2014 de ordenación minera de las Islas Baleares, aprobada para facilitar la apertura de nuevas canteras, aparece misteriosamente listada en el Registro Minero de las Islas Baleares, lo que hace sospechar que se ha podido facilitar documentación falsa a la administración competente, haciendo pasar esta explotación como perteneciente a la misma de la cantera de Can Canyes», critican los ecologistas.

Según el GEN, «se da la circunstancia de que hace años, en un extremo de la parcela se hizo una excavación, con unas dimensiones aproximadas de 0,7  hectáreas, con un acceso rodado precisamente por simular la existencia de una cantera en la zona».

«El proyecto presentado afectaría a unos 100.000 m2 (10 hectáreas), y la extracción prevista supera los tres millones de m3 (3.000.000 m3) de áridos», critican.

Desde el GEN remarcan en que la reciente ley territorial aprobada esta legislatura por el Govern Balear «se anunció una modificación de la ley 10/2014 para hacerla más restrictiva, pero finalmente no ha modificado ni una línea del texto aprobado por el Ejecutivo Bauzá. Ahora se está tramitando, ‘sorprendentemente’, esta nueva cantera», lamentan.

Desaparición de la montaña 

El GEN ja explicado que ya denunció en 2005 «las maniobras existentes para poner en marcha una nueva explotación de áridos que iría vinculada a la construcción de las autovías». «En ese momento, la concesionaria de las obras y el grupo Matutes habían adquirido la cantera de ses Canyes, que suministró buena parte de los áridos a las obras, y parece que los terrenos donde planifican la cantera».

«Ahora, con la reciente aprobación del Plan de Carreteras y el proyecto concreto de la autovía en ca na Negreta (con la connivencia de todos los grupos políticos del Consell insular y del Govern balear, se espera de nuevo la apertura de canteras. La nula sensibilidad ambiental y la alineación con intereses sin escrúpulos de las instituciones queda así crudamente a la vista», acusa el GEN.

Los ecologistas han advertido que «la explotación de esta cantera, a parte de una ilegalidad, supondría la pérdida irreparable de la sierra de sa Granada, espacio natural de incalculable valor ambiental y paisajístico, protegida por legislación autonómica y europea».

«Este nuevo monstruo haría desaparecer, literalmente, otra montaña de la isla. Esta consecuencia de las políticas insostenibles de crecimiento continuado y de infraestructuras públicas no adecuadas a las necesidades y capacidades de la isla es responsabilidad de las fuerzas políticas serviles con intereses especulativos sin escrúpulos», denuncian los ecologistas.

Desde el GEN hacen «un llamamiento a la responsabilidad de las instituciones para que, de una vez, se defienda el interés general y se impidan de una vez y por todas este tipo de maniobras».