@L.Aversa/Una ilustración del pintor Antonio Villanueva se ha convertido en la portada del libro ‘Don Quijote en los cinco continentes’, el último estudio sobre la novela cervantina, realizado por el profesor titular de Filología Alemana de la Universidad de Castilla-La Mancha, Hans Christian Hagedorn, y presentado hace poco más de una semana en la Facultad de Letras de Ciudad Real.
El libro cierra una tetralogía sobre el impacto internacional de la obra de Cervantes, que recoge un total de 76 estudios de expertos de hasta veinte países, y que ha llevado al profesor e investigador un total de once años de trabajo.
Este último volumen, compuesto veintiún estudios sobre la recepción del Quijote a lo largo de los últimos cuatro siglos, en países como Alemania, Argentina, Bélgica, Brasil, Canadá y China, entre otros, tiene en su portada una ilustración del ingenioso hidalgo y de su fiel Sancho Panza, creada por Villanueva hace una década en el histórico café Gijón de Madrid.
Según relata el artista toledano afincado en Ibiza, el profesor alemán le llamó el año pasado para perdirle permiso para utilizar la imagen, que había encontrado en el libro ‘El Quijote en el Café Gijón’.
Esta «figura difusa del Quijote y Sancho cabalgando por una nube o tormenta de palabras de un texto de cualquier lengua», tal y como lo describe Villanueva, había gustado «mucho» al autor del estudio, y el pintor aceptó ya que la propuesta le hizo «mucha ilusión».
Lo más curioso es cómo se creó la ilustración. Tuvo lugar en el mismo Café Gijón, «un café histórico y cultural donde iban todos los escritores, pintores, actores y gente de mal vivir de toda la vida en Madrid», recuerda Villanueva, que frecuentaba el espacio cultural para compartir tertulia con otros artistas.
«Entonces, el relaciones públicas que se llamaba José Bárcenas, quiso hacer un libro, y a todos los habituales no pidió que le hiciéramos un dibujo para meterlo. Y en la misma mesa, la verdad es que con una mancha de café y siguiendo la idea de un grabado de Doré, hice el dibujo de Sancho y el Quijote. Y luego con un lápiz escribí los textos, porque yo siempre escribía en las pinturas entonces. Y quedó muy bien, al tío le encantó y lo metió como ilustración. Y eso fue lo que vio este hombre al cabo de un tiempo y que ahora es la portada del libro», relató Villanueva.
Ahora, su Quijote recorrerá los cinco continentes y habitará en bibliotecas de más de 30 países.
