Las reservas hídricas de Ibiza se sitúan en el 82% y las de Formentera en el 60%

@Noudiari/ El mes de marzo las reservas hídricas de las Islas Baleares se han mantenido en el 75%, porcentaje que representa un aumento de 23 puntos porcentuales respecto del año pasado, según han avanzado desde el ejecutivo balear.

Por islas, en Mallorca y en Ibiza ha habido un descenso del recurso del 1% y del 3%, respectivamente, por lo que estas islas se sitúan en el 75% y el 82% respectivamente, debido a la escasez de precipitaciones registradas el mes pasado y los hechos que los acuíferos van drenando hacia el mar y que continúa el consumo de agua subterránea. En Formentera, las reservas hídricas alcanzan el 60%.

En Menorca los recursos han aumentado un 7% respecto del mes anterior, con lo que se han situado en el 70%, el mismo nivel que en marzo de 2016. Las mejoras más considerables se han dado en los acuíferos de Maó y Ciutadella de Menorca, donde los recursos han aumentado 4 y 9 puntos porcentuales y se han situado en el 49% y el 91% respectivamente.

En cuanto al índice de sequía, todas las unidades de demanda continúan en situación de normalidad, aunque hay ligeros descensos del índice a todas las unidades, excepto a la del levante de Mallorca y en Menorca, donde hay habido un aumento poco significativo. Los valores actuales son similares a los de marzo de 2015 y superiores a los de marzo de 2016.

Déficit interanual del 5% en Ibiza

Los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) reflejan que todavía hay un déficit interanual de precipitación del 4% en Menorca y del 5% en Ibiza. Mallorca, en cambio, tiene un superávit de lluvias del 31%. Con estas cifras, la media de las islas se sitúa en el 26% de superávit.

En general, por tanto, la situación es buena, con datos por encima de la media habitual para esta época del año en Mallorca y en Ibiza, isla que continúa en la mejor situación de los últimos diez años. En Menorca, los recursos se mantienen dentro de los márgenes normales.

Continuar con el ahorro de agua

Se prevé que los recursos disminuyan o se mantengan, según las lluvias de abril. A partir de mayo, en que las precipitaciones son más escasas, se espera que el recurso vaya disminuyendo hasta el otoño, cuando vuelvan las lluvias. Por eso es muy importante continuar la gestión llevada a cabo hasta ahora de fomento del ahorro de agua y del uso de recursos alternativos al agua subterránea.