Si extrapolamos a Baleares los resultados de las últimas elecciones autonómicas que se han celebrado en España, que muestran un perceptible estancamiento en los resultados electorales del PP, una bajada en el PSOE y un auge imparable de VOX, podemos vaticinar que dentro de poco la diputada Patricia de las Heras podría ser vicepresidenta del Consell d’Eivissa con Vicent Marí al frente; y Jorge Campos puede llegar a ser vicepresidente de Marga Prohens.
No es descabellado pensar que el desplome generalizado de Ciudadanos tendrá su continuidad en Balears, no sabemos con qué gravedad. Los cinco escaños en el Parlament que obtuvieron el 26 de mayo de 2019 –y que se quedaron en cuatro al expulsar al diputado por Ibiza Maxo Benalal–, serán difíciles de reeditar en este contexto de ‘calça desfeta´ que es como se percibe ahora a la formación naranja.
Y ojo a las maniobras de Benalal, que como integrante del Grupo Mixto ya se ve sin el paraguas de una fuerza política que le cobije en sus siglas. Intentará buscar el abrigo de VOX con el reclamo de ser el secretario general de la Federación de Comunidades Judías de España, pero será difícil que allí le acepten tras haberles dado calabazas cuando le propusieron ir en su lista por Ibiza en 2019; y aún menos tras el escándalo por el cobro irregular de dietas del Parlament por las que se le reclamaron 15.000 euros y se le ha embargado parcialmente su sueldo de diputado autonómico. ¿Quién querría cargar con un muerto así que, además, no arrastra votos de la circunscripción por la que ahora ocupa su escaño?
Javier Torres, actual vicepresidente del Consell d’Eivissa, está haciendo un buen trabajo. Solo hay que ver que la lista de espera para pasar la ITV ha dejado de ser una calamidad en Ibiza y de tardar seis meses, ahora se tarda escasamente diez días en pasarla. Pero eso no le bastará para evitar el descalabro electoral de Ciudadanos, formación a la que muchos ibicencos votaron sin conocer siquiera sus candidatos ni su programa electoral, por el mero tirón de Albert Rivera.
Ciudadanos en Ibiza dejará de ser determinante para la investidura del presidente del Consell y si el PP no logra la mayoría absoluta, cosa harto difícil, dependerá de VOX. Y no se engañe nadie, que si hacen falta, tanto Vicent Marí como Marga Durán echarán mano de la derecha radical para alcanzar el poder y evitar que gobierne la izquierda.
