Retenidas, violadas o lanzadas al mar desde yates: El caso de ‘La introvertida’ desvela la violencia que sufren mujeres en situación de prostitución en Ibiza

Cinco años, cuatro meses y 15 días. Es el tiempo que ha pasado desde que el cuerpo de una mujer, de entre 25 y 30 años, apareció flotando a 150 metros de distancia del puerto de Santa Eulària un 9 de julio de 2019. La encontraron los ocupantes de un yate y solo llevaba puesto un bikini negro. A día de hoy nadie sabe quién es. De modo que su identidad y las circunstancias exactas de su muerte son un misterio. Sin embargo, algunos datos del caso revuelven el estómago. Ella trabajaba en la prostitución en la zona de Platja d’en Bossa de Ibiza y «el mismo día de su muerte se subió en una furgoneta negra que la llevó al barco de unos clientes adinerados procedentes del Próximo Oriente», según indica la investigación del Grupo de Homicidios de Baleares de la que da cuenta la Interpol. Todo apunta a que fue lanzada desde un yate al mar tras el servicio.

El caso de esta mujer, el expediente 2024-ES07 con la descripción de La introvertida por el carácter solitario y callado con el que la define alguna persona que tuvo contacto con ella, es la punta del iceberg de la violencia, no solo sexual, que sufren las mujeres en situación de prostitución en Ibiza. La introvertida es, además. una de las mujeres que forman parte la lista Identify Me 2024, una campaña de la Interpol que busca la máxima difusión para tratar de identificar a mujeres aparecidas muertas en diferentes puntos de Europa y, con ello, arrojar algo más de luz sobre sus casos. Desde Interpol confirman a Noudiari que no ha habido avances en el caso de Ibiza, al menos por el momento.

Lanzar a prostitutas al mar desde yates tras usarlas no es algo anecdótico en Ibiza. Belén Matesanz, coordinadora autonómica en Illes Balears de Médicos del Mundo, una de las organizaciones que trabaja de manera directa con las mujeres en situación de prostitución en Ibiza, confirma que han tenido conocimiento de otros casos y que, además, han sabido —por los testimonios de las mujeres que atienden— que los servicios en yates son tremendamente peligrosos para ellas. Mabel Lozano, conocida activista contra la trata de mujeres con fines de explotación sexual y colaboradora de la campaña Identify me, confirma a Noudiari que, aunque no conocía el caso concreto de La introvertida, sí le consta «que a las mujeres las tiran por la borda de los barcos». Una ‘práctica’ que también relata un ex concierge, que conoce al menos un caso en el puerto de Ibiza en el año 2018 aunque este, afortunadamente, sin consecuencias graves ya que la mujer alcanzó la costa.

«En Ibiza nos encontramos con peculiaridades con respecto a otros lugares. Es una isla de turismo del deseo que se satisface consumiendo alcohol, drogas y sexo, que los turistas encuentran en la discoteca o pagando por él», relata Matesanz, que alerta al respecto de un fenómeno creciente. «En los últimos años hemos visto una deslocalización de la prostitución, que desaparece de los clubes para invisibilizarse en pisos o en webs. Es decir: en vez de ser el putero el que va al club de prostitución para comprar sexo, son las mujeres las que se desplazan al cliente«, relata.

Esto conlleva un riesgo muy alto. El putero encarga a la mujer que desea con unas características determinadas y esa mujer es la que se traslada al yate, al hotel, al chalet o al piso donde está el hombre que ha hecho en encargo. «En un club acuerdas un servicio sexual con la persona que tienes delante, pero cuando te encargan un encuentro sexual en un yate o en un chalet, tú no sabes qué te vas a encontrar allí dentro: puede haber un hombre o 25 hombres».

El riesgo va mucho más allá cuando entran en juego los yates. «Si estás en una villa tienes un riesgo muy alto, pero estás dentro de la isla de Ibiza. En el momento en el que haces un servicio en un yate tienes el riesgo de que el barco salga de puerto. Y cuando sales de puerto estás totalmente indefensa frente al putero: tanto a las prácticas que quiera hacer, la violencia que quiera ejercer o incluso a que te tire por la borda», explica la experta. 

Tres meses retenida y violada en un yate

El caso más extremo que conocen directamente en Médicos del Mundo de Ibiza en este sentido data del año pasado, 2023, cuando una mujer fue retenida en un yate durante tres meses a lo largo de los que sufrió todo tipo de violencias.

«Ella había acudido para un servicio de una sola noche, pero el yate zarpó, salió de aguas de Ibiza y amarró en Marruecos. Obviamente, ella no había llevado su pasaporte encima. La fueron llevando de país en país hasta que en Italia logró escapar del yate para volver a Ibiza. A lo largo de este tiempo, sufrió violaciones y todo tipo de violencias», relata Matesanz. «Cuando esto le pasa a una mujer en situación irregular, vulnerable y sin recursos frente a un putero que tiene un yate de lujo, posición social e incluso fama… no denuncian por miedo», subraya.

No es el único testimonio de mujeres de Ibiza que fueron a realizar un servicio a un yate y aparecieron en otro país, pero sí el más extremo.

Este caso dejó muy marcada a Matesanz. “Fue muy traumático para nosotras”, admite. Ser conscientes del nivel que pueden tomar las agresiones asusta y les hizo pensar en posibles desapariciones que nunca han sido reportadas ni investigadas.

Las mujeres en situación de prostitución tienen una alta movilidad entre Ibiza y Mallorca, entre Ibiza y la Península e incluso entre la isla y otros países, de modo que hay mujeres que desaparecen y no se sabe a ciencia cierta si están trabajando en otro lugar o si han sido asesinadas o lanzadas desde un yate en alta mar y han muerto. 

«La prostitución deslocalizada implica esto: un riesgo brutal para las mujeres y una impunidad total para los puteros. ¿Cómo demostrar que esas mujeres han entrado en un yate y no han salido después, cuando no hay ningún registro? La trazabilidad del delito es casi imposible, lo que las deja a ellas en unos niveles de riesgo salvajes», lamenta Matesanz. 

«La probabilidad de que no llegues a la costa si te tiran desde un yate, aunque las aguas parezcan tranquilas, es alta, hay corrientes… la probabilidad de que te trague el Mediterráneo es alta y el cuerpo puede aparecer en la costa de otro lugar o no aparecer jamás», añade. 

«Turismo de lujo no es de calidad«

El hecho de que los yates se hayan convertido en un agujero negro para las mujeres que ejercen la prostitución también hace cuestionarse eso de vincular turismo de calidad con turismo de lujo. «No tiene nada que ver. El turismo de calidad es el interesado por el territorio, que lo visita y lo protege, que va de excursión por la isla y gasta en los pueblos y comercios locales. Además, los yates de lujo no consumen nada en Ibiza, salvo alguna parada en un restaurante de lujo. La vida la hacen dentro del yate y se van. El lujo no implica necesariamente calidad», reflexiona Matesanz. 

El caso de ‘La introvertida

La Interpol busca datos, testimonios y pistas para tratar de identificar a La introvertida y aclarar las circunstancias de su caso. En la ficha están los datos que se conocen. La mujer, de 1,60 metros de alto, pelo castaño y ojos azules, fue hallada por los ocupantes de un barco anclado a 150 metros de la costa a la altura de Santa Eulària en julio de 2019. Se había ahogado recientemente y solo llevaba puesto un traje de baño de dos piezas negro con motivos de cachemira blancos.

Su ausencia no fue denunciada por los ocupantes de ninguna de las embarcaciones que fondeaban allí, y tampoco se presentó ninguna denuncia por su desaparición en los días siguientes. Se cree que el día de su muerte había salido en una furgoneta negra para trabajar en el barco de unos clientes adinerados procedentes del Próximo Oriente.

«Una investigación realizada en 2022 y 2023 por el Grupo de Homicidios de las Baleares permitió determinar que la mujer era una trabajadora sexual, presumiblemente de nacionalidad rumana pero de origen húngaro, que prestaba sus servicios en la zona de Ushuaïa de Ibiza y Sant Antoni. Se la consideraba introvertida, ya que apenas hablaba con nadie; las personas con las que tenía trato desconocían su nombre. Solía ir acompañada de un travesti rubio y delgado que trabajaba en la zona», relata la Interpol en su ficha.

«Este es un caso, pero son muchos más. Mujeres que desaparecen o que se han caído por un balcón y no se sabe si las han tirado. Nadie lo investiga. Los casos solo se siguen si hay una familia detrás presionando para que no se olvide», sentencia Matesanz con una frase que provoca escalofríos: «Hay mujeres a las que nadie las busca».

El trabajo de Médicos del Mundo

En Ibiza, Médicos del Mundo interviene desde 2013 y a lo largo de este 2024 llevan atendidas a 359 personas en situación de prostitución: el 92 por ciento son mujeres, el 6 por ciento son mujeres trans y un 1 por ciento son hombres. La mayoría son mujeres latinoamericanas, con un pequeño porcentaje de españolas y rumanas. 

Médicos del Mundo tiene un centro de atención directa en Ibiza y, además, organizan salidas de acercamiento a los pisos que van localizando por las webs. «Si nos dan permiso vamos a verlas a sus casas o pisos, mientras que en el centro fijo les damos atención psicológica, atención social, realizamos pruebas rápidas de VIH y, cuando tenemos presupuesto, también de sífilis. Además, llevamos a cabo todo un proceso integral para conseguir derechos básicos como el derecho al empadronamiento, acceso a tarjeta sanitaria, cuenta bancaria, regularizar su situación administrativa si es viable y realizar talleres de acompañamiento y que conozcan sus derechos, sus deberes y sus opciones», relata.

«Que sepan, en suma, que tienen derecho a denunciar la violencia sexual, que nadie tiene derecho a realizar prácticas que no se haya acordado previamente y que si un putero se retira el condón es una agresión sexual; si un putero ha acordado una penetración vaginal y de repente realiza una penetración por ano es una agresión sexual. Se trata de explicarles sus derechos y acompañarlas en esos procesos. Son mujeres que están realmente muy solas en Ibiza porque el estigma lo seguimos poniendo sobre las mujeres. Nosotras las acompañamos sin juicio y sin ninguna estigmatización. Estamos para lo que ellas necesiten», aseveran. 

En total este año han llevado a cabo 2.300 atenciones a esas 359 personas, que van desde entrega de material preventivo, como condones, masculinos y femeninos, bandas para sexo oral femenino, a condones de dedos, esponjas vaginales… pero, sobre todo, orientación e información y derivación a recursos de la comunidad con el objetivo de una inserción socio laboral. 

No tener una vivienda propia es un tema que les afecta especialmente

El objetivo final que persigue Médicos del Mundo es la abolición de la prostitución y para ello intentan dar a las mujeres alternativas reales y que puedan tener trabajos fuera de la prostitución. «Pero trabajamos también por la sensibilización y por la transformación social, para lograr que desaparezca la demanda. Si desaparece y empezamos a tener relaciones afectivo-sexuales adecuadas, consentidas y con sentimiento y deseo mutuo, desaparecerá la demanda y, si desaparece la demanda, desaparece la oferta», remarca Matesanz. «Pero a esas mujeres hay que darles alternativas laborales. El cien por cien de las mujeres que atenderemos están en la prostitución porque es la única alternativa de vida que han encontrado para sobrevivir y atender a sus familias. Sin documentación, a veces, con alquileres tan altos, de 1.500 euros mensuales, es muy complicado mantenerte en Ibiza sola y sin red social. Te ves abocada a ejercer la prostitución para poder sobrevivir y el problema de la vivienda les afecta especialmente», concluye Belén Matesanz.