Los consells de Ibiza y Mallorca han acordado poner en marcha un plan piloto para trasladar basura de las Pitiusas a la planta de tratamiento e incineración de Son Reus, en Palma, con el fin de afrontar la situación generada por el final de la vida útil del vertedero ibicenco de Ca na Putxa.
La presidenta del Govern, Marga Prohens, ha anunciado el pacto alcanzado este lunes en la tercera Conferencia de Presidentes de la legislatura, que contempla un pago de 50 millones de euros por parte del Ejecutivo autonómico al Consell de Mallorca para compensar las inversiones realizadas en la infraestructura en los últimos años y que han sido sufragadas «exclusivamente» por los mallorquines.
Esta aportación, ha añadido Prohens, permitirá reducir la tarifa de los residuos a los ciudadanos de Mallorca, pero también a los de las Pitiusas, ha explicado Prohens.
La presidenta ha destacado que la solución del traslado permitirá el cierre del vertedero insular de Ca na Putxa, previsto para 2028, para que Baleares dé el «paso definitivo» hacia el objetivo de vertedero cero que marca la Unión Europea y que va «en línea» con la apuesta del Govern y los cuatro consells «hacia unas islas más sostenibles, más verdes, más respetuosas con su medio ambiente».
Prohens ha anunciado que el Govern encargó hace meses un estudio para que el traslado se realice «con todas las garantías medioambientales», tanto por mar como por carretera.
El presidente de Ibiza, Vicent Marí, ha agregado que el plan piloto comenzará tras la temporada turística, «a principios de octubre-noviembre», y que se hará de forma gradual, de menor a mayor cantidad de residuos. Ha dicho que el objetivo es buscar la manera «más eficiente y menos molesta» para el transporte terrestre en Ibiza y en Mallorca.
Marí ha explicado que el traslado será una solución «a largo plazo», pero no definitiva, y ha recordado que sigue abierto el proceso de participación ciudadana que también pone sobre la mesa la opción de construir una incineradora en Ibiza.
«No podemos decir que el traslado será la solución definitiva, para siempre. Será la solución mientras no se adopte otra más eficiente, ya sea tecnológicamente o legalmente, que cubra todas las necesidades de la isla de Ibiza», ha añadido Marí. Otras soluciones, ha justificado, serían «difíciles o imposibles» de implementar «en un periodo inferior a 10 o 15 años».
Sobre el cierre de Ca na Putxa, Marí ha matizado que Ibiza necesitará mantener un vertedero de emergencia y que solo se cerrará cuando haya una «solución definitiva». La voluntad, ha añadido, es ir hacia el residuo cero y enviar a la incineradora de Son Reus lo mínimo posible.
Por su parte, el presidente del Consell de Mallorca, Llorenç Galmés, ha destacado que la inyección de 50 millones de euros del Govern permitirá rebajar un 10 % la tarifa de residuos a partir de 2026.
También se sumarán otros dos ingresos extraordinarios con la entrada de toneladas de residuos de las Pitiusas a la planta de Son Reus y la venta de la generación de electricidad que se produzca.
«Todo esto repercutirá positivamente sobre la tarifa, por lo tanto afectará a los bolsillos de todos los mallorquines y mallorquinas», ha remarcado.
Galmés ha recordado que la planta funciona al 70 % y que el traslado no supondrá «ningún problema» ni a la infraestructura ni a los mallorquines.
En cifras, ha señalado que Ibiza y Formentera prevén enviar unas 85.000 toneladas al año, mientras que en Mallorca, solo en julio y agosto, se queman 60.000 toneladas cada mes.
El presidente de Menorca, Adolfo Vilafranca, ha explicado que el sistema actual del vertedero menorquín «está llegando a su límite operativo» y que pronto también tendrán que escoger «entre trasladar los residuos para su tratamiento fuera de Menorca o encontrar una solución propia, sea de incineración o una alternativa tecnológica».
Óscar Portas, presidente de Formentera, aunque ha compartido el objetivo de reducir el transporte de residuos, ha recordado que la pitiusa menor cerró su vertedero en 2007 y, desde entonces, transporta su residuo a Ibiza, que ahora continuará hacia Mallorca.
EFE
A Mallorca se n’enriuen de naltros…i amb raó. Sobra població, s’evidencia amb que no tenim aigua i hem d’enviar es fems a Mallorca per incinerar ja que aqui no hi cabem… Però quin és es projecte des polítics actuals? construir més…per desgràcia, es sentit comú és es menys comú i així mos va. Anyorarem tempsos que no em viscut.
Molts d’anys de vida Eivissa, mal vinguda snob-ibiza