La violencia machista en Formentera dejó ayer un balance devastador con dos agresiones graves en la localidad de es Pujols: una mujer de 45 años fue asesinada de una paliza presuntamente por su pareja, y otra resultó herida de gravedad tras ser apuñalada por su expareja.
La mujer asesinada, de 45 años y nacionalidad italiana, recibió numerosos golpes presuntamente por parte de su pareja en el apartamento turístico que tenía alquilado en el edificio Mirada Nº 1, en es Pujols. El suceso tuvo lugar entre la madrugada y primera hora de la mañana, y, según fuentes de la investigación, la mujer habría fallecido entre las 3:00 y las 8:00 horas.
La víctima y el presunto agresor, también italiano y residente habitual en Formentera, mantenían una relación intermitente marcada por conflictos frecuentes, según han informado a NouDiari personas del entorno de la pareja.
Cuando los servicios sanitarios llegaron al lugar, solo pudieron certificar su fallecimiento. El hombre, de mediana edad y con negocios relacionados con el alquiler turístico en Formentera e Ibiza, fue detenido inmediatamente por la Guardia Civil como presunto autor del crimen. El resultado de la autopsia, que está pendiente, será clave para esclarecer la hora exacta del fallecimiento y otros detalles importantes.
Segunda agresión con arma blanca a una mujer
Horas después, alrededor de las 11:00 de la mañana, se produjo un segundo episodio de violencia machista en la misma zona. Un hombre de nacionalidad colombiana, que tenía una orden de alejamiento vigente, según ha podido saber este diario, se presentó en el lugar de trabajo de su expareja -un establecimiento turístico de es Pujols- y la apuñaló varias veces, una de ellas en el cuello.
La víctima fue trasladada inicialmente en taxi al hospital de Formentera y, dada la gravedad de las heridas, fue posteriormente evacuada en helicóptero al hospital Son Espases, en Mallorca. Su estado es grave, aunque en principio no se teme por su vida gracias a la rápida intervención.
El presunto agresor también fue arrestado poco después por agentes de la Guardia Civil.
