Cristóbal Herrera ha asumido el cargo de presidente de la patronal Baleval (Asociación Balear de Empresas de Alquiler de Vehículos con y sin conductor), hace poco más de un mes en sustitución de Julio Nieto. Una de las “patatas calientes” que han pasado a sus manos y que le toca gestionar es el diálogo con el Consell de Ibiza sobre la regulación de entrada de vehículos en Ibiza. Han sido críticos y beligerantes —incluso han interpuesto un contencioso administrativo contra la normativa— y hacen un balance negativo de su primera temporada en vigor, insistiendo en que las flotas de alquiler “no son las causantes del problema de movilidad de la isla”. Baleval representa en Ibiza a once grandes y medianas empresas de alquiler de coches. Coincide con la Agrupación Empresarial de Alquiler de Vehículos con y sin Conductor de Baleares (AEVAB) en que han sufrido una caída de facturación en Ibiza en torno al 14 por ciento con respecto a 2024.
—¿Qué balance hace de la temporada 2025 en Ibiza, en líneas generales?
—La temporada ha sido bastante irregular: hemos visto el mismo volumen de clientes, pero han alquilado coches menos días, lo cual repercute en una bajada de facturación. Calculamos un 14 por ciento.
—¿En qué medida les ha afectado el establecimiento de un cupo de entrada de vehículos de alquiler a la isla?
—Nos ha afectado claramente: hay empresas que se han enfrentado a recortes del 30 al 50 por ciento de los vehículos. Y eso repercute claramente en la calidad del servicio que le das al cliente. Siempre buscamos dar un buen servicio y un incentivo mayor que el que da el rent a car de enfrente. Este año no se ha notado tanto, pero empezará a apreciarse una bajada en la calidad en el futuro. También afecta a la gente que visita Ibiza desde otras islas: quieren alquilar un vehículo y resulta que no pueden.
—Pero Ibiza tiene un problema de exceso de vehículos y congestión, ¿qué proponen entonces para aliviarlo o atajarlo?
—Si buscas una movilidad sostenible lo que tienes que hacer, antes de nada, es analizar bien cuáles son las causas y atacar a esas causas. En Ibiza tenemos congestiones todo el año, de modo que restringir el ‘rent a car’ no va a ayudar a resolver el problema. Hace falta, primero, una política de transporte público mucho más adaptada a la realidad de la isla, cosa que a día de hoy no se está produciendo. Hace falta la reordenación total del transporte público.
Ha salido un estudio Meteoclim que dice claramente que Ibiza no está colapsada en su conjunto: lo que hay son puntos específicos donde sí hay problemáticas y son esos puntos donde se debería trabajar. Pero no estamos viendo ni mejoras en el transporte público, ni adaptación de las infraestructuras, ni mejora en la gestión tecnológica de los flujos de vehículos.
Mientras sigan en la misma línea, lo único que están haciendo es atacar al sector turístico, dar una mala imagen de cara al exterior. Al restringir los vehículos de alquiler estás yendo contra un tipo de turismo que es precisamente el que estás buscando. Es decir, quienes alquilan coches son los turistas de más alto poder adquisitivo, que quieren moverse por la isla para ir dejando dinero en puntos donde habitualmente no lo dejarían porque no tienen buen acceso de otro modo. El estudio de Meteoclim dice que más del 80% del tráfico de la isla es de residentes pero se está focalizado en el rent a car y dando mala imagen a una industria de la que dependen muchas familias en Ibiza. Al final va a ir en contra del propio interés de quienes viven en Ibiza.
—Pero, ¿ustedes entienden el malestar de la población por el colapso de tráfico que sufre la isla?
—Entendemos perfectamente que haya malestar en ciertos lugares por los flujos turísticos, pero eso no se soluciona restringiendo rent a cars.
—¿Tienen ustedes alguna estimación de cuántos vehículos de alquiler han dejado de entrar en Ibiza por la normativa del Consell, en comparación a 2024?
—No hay una estimación y esa es otra de las cosas que reclamamos al Consell desde el principio: lógico sería, primero, tener claros cuáles son los datos, es decir, poner en marcha las medidas de control y saber qué vehículos van y vienen. Una vez que tengas claros los datos ya podrás saber cuál es el impacto que tienen.
La única realidad que podemos ver es que se pidieron 27.000 vehículos y sólo se han permitido 16.000. Pero, ¿cuántos de esos 27.000 son reales o simplemente eran estimaciones de empresas que querían crecer y que por eso pidieron más, aunque tal vez finalmente no iban a ser esos números exactamente?
—Si se pidieron 27.000 y entraron 16.000, se puede pensar que se ha evitado que 10.000 vehículos o más circulen por las carreteras de Ibiza…
—Volvemos a lo que te decía antes: ¿son datos reales o eran simplemente previsiones al alza hechas por parte de empresas que habían inflado cifras para intentar tener una mayor cuota de mercado este año, a la vista de que iba a hacer restricciones? Es algo que no sabemos. Precisamente la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha recurrido el acuerdo del Consell que limita la entrada de vehículos en la isla durante la temporada de verano porque utiliza un método para repartir las autorizaciones entre las empresas de alquiler que discrimina y restringe de forma injustificada la competencia en el mercado.
Es decir, que el Consell ha puesto en marcha un sistema que penaliza a unas empresas frente a otras: ¿porque hay empresas que han podido operar con total normalidad y otras que no? Lo que está haciendo es intervenir en el mercado en favor de unas ciertas empresas en detrimento de otras. No cabe duda de que este año seguramente haya habido menos vehículos que el año anterior, pero lo que hay que hacer es contar vehículos y todavía no lo están haciendo.
—¿Ha afectado la normativa a la contratación de personal en sus empresas?
—En Ibiza ha habido entre un 20 y un 25% menos de contratación de personal respecto al año anterior.
—Ustedes desde Baleval también han interpuesto un recurso contencioso administrativo contra el acuerdo del Consell, ¿en qué punto está y qué esperan del recurso?
—El contencioso está abierto y estamos esperando a la resolución. La vía del contencioso administrativo no es precisamente rápida en España… nos dicen que suele tardar como máximo dos años. Por tanto, hasta mayo o junio de 2027 a lo mejor no tenemos una resolución. Lo que esperamos es que declaren ilegal esta regulación porque supone una limitación a la libertad constitucional de movimientos. Algo así no lo puedes justificar con las argumentaciones que ha dado el Consell.
Lo que necesitan hacer es un estudio serio en el que se vea efectivamente cuántos vehículos hay en la isla en cada momento. Saber cuáles son de residente, cuáles son de rent a car, cuáles son de personas que vienen en barco, etcétera, etcétera. Y, a partir de ahí, plantear cuál es la mejor solución para atacar el problema que el Consell dice que está intentando arreglar. No ha habido ni un estudio lo suficientemente serio.
¿Qué pasaría, por ejemplo, si se crea una zona de bajas emisiones en la que se pueda restringir el tráfico según el etiquetado medioambiental del vehículo? Eso no lo analiza. No se analiza tampoco qué ocurriría con una mejora generalizada del transporte público con respecto a todos los movimientos diarios de gente que va al trabajo en coche y que provoca atascos. No hay un estudio que explique qué pasaría si se gestionan mejor esos cuatro puntos congestionados que menciona el estudio de Meteoclim. En definitiva, no hay un estudio con suficiente peso que avale la solución que han buscado.
—Si la justicia diera la razón a Baleval, ¿esto tendría consecuencias económicas para el Consell de Ibiza con carácter retroactivo?
—Si el juzgado determina que la regulación es ilegal, primero el Consell de Ibiza tiene la capacidad de recurrir. Hasta que la sentencia no fuera firme no se tendría por qué anular la regulación. Una vez que quede claro que es ilegal, las empresas, a nivel individual, podrían hacer una reclamación patrimonial por las pérdidas que considere que le ha generado la aplicación de la ley.
—¿Conoce qué empresas van a pedir responsabilidad patrimonial?
—No se sabe, pero ten en cuenta que hay empresas que habían pedido 1.200 vehículos y les han dado 600. La pérdida es bastante grande.
—¿Mantienen el diálogo y el contacto con el Consell de Ibiza a pesar de ese contencioso de por medio y de las críticas a la ley?
—Desde el punto de vista del diálogo no tenemos ninguna queja. El Consell de Ibiza siempre ha estado abierto a mantener reuniones, a hablar, a presentar sus propuestas, a escucharnos… el canal está abierto. Otra cosa distinta es en qué ha derivado eso: evidentemente en algo con lo que no estamos de acuerdo y que insistimos en que es ilegal.
—El conseller Mariano Juan insiste en que este ha sido el “año cero” y que habrá avances y mejoras….
—El diálogo va a seguir y, de hecho, seguimos dialogando. Pero nuestra opinión sigue siendo la misma: no puedes establecer una regulación así sin un estudio serio. Y, para nosotros, si se hace un estudio serio, la conclusión será que limitar el rent a car no tiene sentido.

—La flota de vehículos de residentes ha subido un 150% desde 1996 y Baleària insiste en que el problema de base lo tenemos en casa. ¿Está de acuerdo?
—La media de vehículos por persona en las Illes Balears es la más alta de España. ¿Hay que responsabilizar a la gente porque tiene coche? Yo creo que no. Las familias de Ibiza, si se compran un coche o dos es porque, evidentemente, lo necesitan. Y lo necesitan porque para moverte por la isla necesitas coche. No queda otro remedio porque el transporte público es deficiente. La solución es darle alternativas a quien reside en la isla y a quien la visita para que utilice otro tipo de transporte que sea más sostenible. Eso ya va a hacer que, de manera natural, la demanda de vehículo de alquiler baje. Porque si la gente, hablando exclusivamente del turismo, puede ir desde el aeropuerto a su punto de destino con un buen servicio de autobuses, ¿para qué se va a gastar dinero en un vehículo de alquiler? Habrá personas que sigan necesitando el vehículo alquiler: grupos de amigos o familias con niños y muchas maletas para los que ir en autobuses puede ser un poco problemático. Pero habrá una gran masa de personas que, como hacemos todos cuando viajamos, abran su móvil para ver cómo desplazarse en transporte público desde el aeropuerto y por la isla.
—Si la isla tuviera un buen transporte público perjudicaría a su sector porque menos gente usaría Rent a car, ¿no?
—Me parecería una idea excelente que se mejorase el transporte público porque, al final, eso sí que tiene un impacto en la gente, eso sí que mejora el bienestar de todas las personas que viven allí y, después, de quienes visitan la isla. Esa es nuestra posición desde el principio. Nosotros podemos entender que haya malestar por los problemas de tráfico, pero para eliminar ese malestar lo que hay que hacer es solucionar el problema con transporte público, que es lo que se hace en todas partes menos aquí. Primero tienes que crear la alternativa para que la gente empiece a cambiar de hábitos.