Una vez finalizada la temporada alta, el Ayuntamiento de Sant Josep ha iniciado los trabajos de retorno de la posidonia oceánica retirada.
Esta operación se prolongará hasta el próximo 30 de octubre. La actuación, iniciada el pasado día 20, tiene como objetivo proteger las playas del municipio y garantizar la retención natural de la arena frente a los temporales de invierno.
Y es que el retorno de la posidonia crea una barrera natural en la playa que permite recuperar la arena que se haya podido arrastrar durante las operaciones de retirada y asegurar que la posidonia continúe desempeñando su función ecológica y protectora, clave en la formación natural de las playas. Retiene y asienta la arena, de modo que su función es fundamental.

En este sentido, Felicia Bocú, concejala de Medio Ambiente, Sostenibilidad y Litoral, ha destacado que:
“Este es un proceso que llevamos a cabo cada año, principalmente porque somos conscientes de que si no retornamos la posidonia, no tenemos playa. Es un gesto esencial para mantener el equilibrio natural de nuestro litoral y garantizar su conservación a largo plazo.”
Este año, para no perjudicar a establecimientos y concesionarios que aún puedan estar abiertos, los trabajos comenzarán en las zonas con menor ocupación o en proceso de cierre. En todos los casos, la posidonia se devuelve siempre a la misma playa de donde se ha retirado, siguiendo criterios técnicos y ambientales.
En la bahía de Portmany, el retorno se realizará de forma consensuada con los pescadores, especialmente en las playas de Punta Xinxó y s’Estanyol – sa Flama, para evitar interferir con la pesca del moixó.
Cabe recordar que la gestión de la posidonia en el municipio se lleva a cabo de acuerdo con el Decreto 25/2018 y con las indicaciones del Govern, incluidas en las autorizaciones anuales para su gestión. En este sentido, el Ayuntamiento de Sant Josep aplica desde hace años criterios técnicos para reducir el impacto de las operaciones de retirada, minimizando la pérdida de sedimento y manteniendo el perfil natural de las playas.
La posidonia, tanto viva como muerta, juega un papel esencial en la protección del litoral: sus hojas muertas acumuladas en la orilla atenúan la fuerza de las olas, retienen la arena y reducen la erosión causada por los temporales. Además, su presencia favorece la formación natural de la playa, ya que con el tiempo estos materiales se integran al sedimento.
La política de retorno implementada por el Ayuntamiento de Sant Josep «permite evitar el envío de toneladas de posidonia al vertedero, con el correspondiente ahorro económico y beneficio ambiental. Una vez retornada, la naturaleza sigue su curso hasta el inicio de la nueva temporada», destacan en un comunicado.
