El mosquito tigre, una especie invasora procedente del sudeste asiático y localizada por primera vez en Balears en 2012 —llegó a través del transporte de plantas y en llantas de neumáticos—, se ha convertido en un auténtico quebradero de cabeza en Ibiza. Porque este mosquito no se parece a los demás. “Es diurno, insistente y, al contrario que otras especies, es capaz de picar varias veces seguidas si se le espanta e interrumpe mientras pica”, explica a Noudiari Miguel Ángel Miranda Chueca, catedrático de Zoología de la UIB (Universitat de les Illes Balears) e investigador del INAGEA (Instituto de Investigaciones Agroambientales y de Economía del Agua). Miranda destaca que son estas características las que lo hacen “especialmente molesto y tan eficaz como transmisor de enfermedades”. Recuerda, en este sentido, que Ibiza tiene el dudoso honor de haber albergado el único caso de transmisión de Dengue documentado en Balears y en el que mosquito tigre fue el causante. Entró en Ibiza una persona contagiada y, a través d de picaduras de mosquito tigre, transmitió la enfermedad a un grupo de turistas alemanes que desarrollaron la enfermedad al regresar a su país.
Lo cierto es que el mosquito común o mosquito trompetero (Culex pipiens) parece habe perdido la batalla contra el mosquito tigre (Aedes albopictus), que campa a sus anchas en Ibiza.
La confluencia de las lluvias de la borrasca Ex-Gabrielle y de la DANA Alice, unidas a las altas temperaturas de este mes de octubre han sido el caldo de cultivo ideal para esta especie, que, al contrario que otras, tiene la particularidad de que pica todo el día, no solo en las horas habituales, que solían ser al caer el sol.
Para acabar con él hay muchos métodos, pero la clave, para el experto, está en combinar medidas físicas, productos seguros y, sobre todo, eliminar los focos de cría. «Ningún spray es tan eficaz como controlar los depósitos de agua estancada en una maceta o en una terraza», resume el experto.
Mientras el Consell combate la plaga usando incluso drones, los ciudadanos echan mano de insecticidas y repelentes, hasta el punto de que se han visto estanterías de supermercados completamente vacías de estos elementos, tal es la demanda.
Pero ¿cuáles son los productos que realmente funcionan? El catedrático Miguel Ángel Miranda Chueca aclara qué métodos son eficaces y cuáles son un gasto inútil.
Lo que sí funciona
1. Mosquiteras y barreras físicas.
“El mejor método sigue siendo el más simple: impedir que entren. Las mosquiteras en ventanas y puertas reducen mucho la exposición”, explica Miranda. También aconseja usar ropa que cubra la piel y evitar estar al aire libre en las horas de mayor actividad, aunque recuerda que el mosquito tigre pica durante el día, con lo cual este consejo es difícil de llevar a cabo.
2. Difusores eléctricos y espirales.
Los difusores eléctricos (de pastillas o de líquido) son productos “seguros para humanos y mascotas” y están aprobados por la Unión Europea. “Las cantidades de insecticida que liberan son muy bajas y su efecto es más de repelencia», indica el experto.
3. Repelentes tópicos en la piel.
Para protegerse con repelentes que se ponen directamente en la piel, recomienda consultar siempre la lista de productos autorizados por la Conselleria de Salud o preguntar en la farmacia. “Hay formulaciones suaves y eficaces, como la citronella, y otras más potentes a base de DEET. No todas son adecuadas para todos los usuarios, hay productos no indicados para niños muy pequeños o embarazadas”, recuerda.
Lo que no funciona (o puede ser contraproducente)
❌ Trampas caseras, pulseras y otros artefactos de ultrasonidos.
“No tienen ninguna base científica. Ningún sonido repele a los mosquitos”, advierte Miranda con respecto a artefactos que se venden online aprovechando las redes sociales y la gente que hace negocio vendiendo todo tipo de aparatos y remedios.
Tampoco las trampas de luz eléctrica son muy recomendables en hogares, aunque pueden serlo en almacenes o cocinas de restaurantes. «Estas trampas se llevan por delante muchos insectos completamente inofensivos» y este experto no las considera adecuadas, especialmente en zonas de campo, por ejemplo, donde «fríen» todo tipo de especies de manera indiscriminada.
❌ Aerosoles insecticidas domésticos.
Son muy populares pero su uso debe ser puntual. “Son útiles solo para matar uno puntual, pero no eliminan el problema. Abusar de ellos rociando toda la casa puede causar irritación respiratoria y dañar insectos beneficiosos”, explica. Para tratamientos más serios, recomienda acudir a empresas especializadas, que usan productos controlados, pesados para los mosquitos y solo cuando es estrictamente necesario.






