Baleares continúa encabezando las zonas del país donde la vivienda es más costosa. Según el informe mensual de precios de venta del portal inmobiliario pisos.com, la vivienda de segunda mano en el archipiélago alcanzó en octubre de 2025 un precio medio de 5.105 euros por metro cuadrado, lo que supone un mínimo retroceso mensual del -0,06%, el segundo mayor descenso de España. Pese a esta caída puntual, la evolución interanual muestra un notable incremento del 6,25%, convirtiendo a Baleares en la segunda región con el repunte más destacado del país.
El archipiélago se mantuvo además como la autonomía más cara de España, situándose por delante de Madrid, que registró un precio medio de 4.516 €/m². En el conjunto del Estado, la vivienda de segunda mano alcanzó los 2.418 €/m², con un ascenso mensual del 0,20% y un incremento anual del 3,30%. El informe señala un escenario de fuerte presión en el mercado residencial. Los precios continúan en ascenso, la oferta disponible es limitada y los compradores afrontan crecientes dificultades para acceder a una vivienda.
Según Ferran Font, director de Estudios de pisos.com, esta situación genera una sensación de urgencia entre los potenciales compradores: “Hay que actuar rápido, porque esperar significaría asumir condiciones menos favorables”. El experto advierte, sin embargo, de que esta dinámica distorsiona el proceso de compra: “Comprar una vivienda debería ser un proceso meditado, no un sprint. En muchos casos, los compradores anticipan que los precios seguirán subiendo, lo que crea un efecto de espiral”.
A pesar de que la oferta disponible ha mostrado ligeros aumentos en los últimos meses, sigue siendo insuficiente para aliviar la presión de la demanda. “En un país donde la vivienda en propiedad es el pilar del ahorro familiar, es importante facilitar la accesibilidad”, subraya Font.
En el ámbito local, Palma registró un descenso mensual del -0,15%, aunque en comparación interanual experimentó una subida del 6,55%, siendo la octava capital de provincia con mayor incremento del país.
Con un precio medio de 5.308 €/m², la capital balear se situó como la tercera ciudad más cara de España, ratificando su posición entre los mercados más tensionados y de mayor valor del territorio nacional.






