Un grupo de delfines fue avistado hace apenas unos días, el viernes 12 de diciembre, nadando a toda velocidad en la proa de un llaüt frente a la costa de Sant Antoni, en un encuentro captado en vídeo por Juan Carlos Escandell, marino mercante y conocido docente en Can Marines. Este comportamiento es bastante habitual en estos cetáceos, que disfrutan de lo lindo ‘surfeando’ la ola de proa, que les da impulso, les permite ahorrar energía y también les proporciona una forma de juego y curiosidad.
Según explica Escandell a Noudiari, «los delfines son una presencia relativamente habitual en la zona cuando disminuye el tráfico marítimo«. En esos momentos, los cetáceos se acercan más e incluso entran a la bahía de Sant Antoni, donde no es extraño verlos nadar en grupo. Esta circunstancia se da con mayor frecuencia en invierno, cuando la actividad náutica es menor.
Escandell señala que no se trata tanto de que los delfines se acerquen al puerto, «sino de que el puerto ha ocupado parte de lo que tradicionalmente era su hábitat».
Su presencia suele coincidir con una menor densidad de peces en la zona, ya que los delfines también están allí para alimentarse .
En el encuentro, Escandell pudo observar una pequeña manada, con ejemplares jóvenes acompañados por adultos, probablemente una familia.
«Los delfines son animales territoriales y suelen permanecer en las mismas áreas, donde los grupos familiares se reproducen y se mantienen con el tiempo», explica Escandell a Noudiari.
El avistamiento tuvo lugar a última hora de la tarde del viernes, entre las 16.30 y las 16.45 horas, con la luz ya baja y cerca de la puesta de sol, con los islotes de Sa Conillera, Illa d’en Bosc y s’Espartar al fondo. La embarcación se dirigía a pescar calamares, aunque, como indicaba Escandell, «cuando hay delfines en la zona, las posibilidades de pesca disminuyen (como sucede con el atún rojo)».
Una imagen que nos habla de la inabarcable belleza de nuestras costas y que coincide con una imagen mucho menos amable, también relacionada con esta especie, ya que el pasado fin de semana fue encontrado un delfín muerto en unas rocas de la zona de la playa de ses Salines.






