Rajoy se compromete a revisar la situación de la desaladora de Santa Eulària y la central eléctrica des Ca Marí

@Noudiari/ El presidente del gobierno, Mariano Rajoy, se ha comprometido a revisar el estado en que se encuentran las desaladoras de Santa Eulària y Cuitadella (Menorca), ambas ya ejecutadas y pendientes de conexión a la red, durante la reunión que ha mantenido este miércoles con la presidenta del Govern balear, Francina Armengol.

En el caso de la infraestructura hidráulica de la Villa del Río, el problema es que ni el gobierno central ni el ejecutivo autonómico quieren hacerse cargo del sobrecoste de la obra para poder recepcionarla y que entre en funcionamiento. Armengol le ha trasladado a Rajoy la necesidad de «una intervención urgente, teniendo en cuenta la situación en la que se encuentran las islas, especialmente Ibiza, que está sufriendo problemas graves con el suministro de agua».

El presidente del Gobierno se ha comprometido también a revisar la situación de la central eléctrica des Ca Marí, en Formentera, que se encuentra pendiente de una autorización ministerial que permita la modernización de las actuales instalaciones que, como vienen denunciando los vecinos, causa molestias y afecta a la calidad de vida de quienes residen en la zona.

Mejorar la financiación

Armengol y Rajoy también han acordado durante este primer encuentro convocar de forma urgente la Comisión Mixta de Financiación. La presidenta balear ha destacado que ha habido «un buen clima de diálogo con el presidente, que se ha comprometido a dialogar sobre un nuevo Régimen Especial para Baleares (REB), nuevas inversiones estatutarias e inversiones en carreteras, además de la conexió de las desaladoras».

Rajoy se ha comprometidoa solicitar al Ministerio de Hacienda «la convocatoria urgente de la Comisión Bilateral Mixta de Financiación, que no se reúne desde hace cuatro años», en la que Baleares y el gobierno central tratarán temas que afectan exclusivamente a las islas.

Buen clima de diálogo

La presidenta del Govern ha explicado tras la reunión que «ha habido un buen clima de diálogo» que ha permitido abordar otras cuestiones como «la necesidad de flexibilizar el déficit establecido para el 2016, la suspensión de la LOMCE o las últimas medidas tomadas por la Comunidad Autónoma en materia de sanidad», como la devolución de las tarjetas sanitarias a los inmigrantes sin papeles o el gasto de 35 millones de euros que ha supuesto en Baleares el pago de los fármacos para los enfermos de Hepatitis C, para los que Armengol ha pedido que el gobierno central asuma parte del gasto.

Por su parte el Govern balear, le ha ofrecido al presidente Rajoy su «solidaridad y sus recursos para dar apoyo a una respuesta conjunta en la crisis humanitaria del Mediterráneo».