Las familias de Patricio y Viñals inician una recogida de firmas para instar a Europa a instalar alcoholímetros en los coches

Natalia Cárdenas / Vicent Torres / Las familias de Dani Viñals y Vanessa Patricio, junto con las de otras tres víctimas mortales en accidentes de tráfico, han iniciado hoy una recogida de firmas en la plataforma Change.org para instar al Parlamento Europeo a que todos los coches de nueva fabricación incluyan un sistema electrónico de detección de alcohol.

«Tu hijo ha fallecido hoy en un accidente de tráfico. El conductor iba muy borracho». No sabéis lo duro que es enfrentarse a una noticia así. Nuestros familiares Paula, Vanessa, Daniel, Iván y Ana han muerto porque hubo cinco personas que decidieron conducir sus coches bajo los efectos del alcohol y/o de las drogas», así inician esta petición conjunta estas familias que ya,lucharon en bloque por llevar al Congreso la petición de endurecimiento de penas al volante, aprobada la semana pasada.

Explican en su petición que ellos ya no van a recuperar a sus seres queridos, pero quieren evitar el sufrimiento a más familias.

Además, en la petición afirman que existen unos sistemas electrónicos que se instalan en los vehículos y que, por la respiración del conductor, detectan el nivel de alcohol en sangre. Si ese nivel de alcoholemia es superior al permitido, el coche no arranca.

Por ello, piden que se incluya este sistema para luchar contra el abuso de alcohol al volante desde ya en los coches de nueva fabricación.

Así, aseguran que se salvarían muchas vidas: «Si los coches no arrancan cuando sus conductores van borrachos, estaremos salvando miles de vidas y evitando esta noticia tan trágica a miles de familias».

Todos ellos comparten una historia que se podría haber evitado si los conductores que mataron a sus familiares no hubieran cogido el coche borrachos o drogados.

Daniel Viñals perdió la vida entrenando en bici cuando un conductor, que había consumido alcohol y drogas, le arrolló a en la carretera de Sant Josep dándose a la fuga.

Vanessa Patricio se dirigía a su puesto de trabajo en el víal de la carretera del aeropuerto de Eivissa cuando dos coches sufrieron un accidente y uno de ellos acabó con su vida con el impacto, uno de los conductores había consumido drogas.

Paula Fornás, era una joven mallorquina que fue atropellada por una conductora ebria al volante, tenía 15 años. Parecido fue el atropello del joven Iván en Madrid.