Durante el Debate de Política General del Consell Insular d’Eivissa, el choque entre las posiciones del PSOE y el gobierno del PP ha quedado marcado por un mensaje contundente: la oposición denuncia una isla dividida entre riqueza y marginalidad social, mientras el ejecutivo defiende su gestión con datos y cumplimiento programático.
La portavoza del PSOE, Elena López Bonet, ha lanzado duras críticas contra el balance de Vicent Marí, calificándolo de “triunfalista”. Ha afirmado que bajo su mandato, Ibiza se está convirtiendo en una isla para ricos mientras otros viven en chabolas.
López Bonet ha denunciado seis años sin avances reales en vivienda, movilidad o protección del territorio. Acusa al Consell de aprobar reformas del PTI que permitirán 1.400 nuevos alojamientos turísticos, incluyendo construcción en suelo rústico, en vez de ofrecer soluciones para la clase media.
Según ella, el gobierno del PP vive instalado en la propaganda y los titulares vacíos, mientras las familias no logran emanciparse y aumentan los desahucios y asentamientos precarios.
En respuesta, el presidente Vicent Marí, respaldado por el portavoz Mariano Juan, ha defendido el 62 % de cumplimiento del programa electoral y el avance del 18 % en proyectos casi finalizados, como muestra de gestión efectiva y compromiso con el bienestar de la isla.
El PP ha destacado medidas clave:
- Eliminación de 2.000 anuncios ilegales de Airbnb y sanciones a taxis pirata.
- Reducción de 9.000 plazas turísticas mediante el PIAT.
- Duplicación de la inversión social, pasando de 16 a 32 millones en ayudas y servicios.
- Apoyo a vivienda protegida y políticas de control del alquiler ilegal.
- Lanzamiento del sello “Ibiza Family Moments” y nueva regulación de vehículos turísticos.
Juan ha acusado al PSOE de gobernar durante años sin mejorar la situación habitacional, mientras fomentaban la construcción para ricos. Asimismo, ha resaltado que los socialistas fueron responsables de un mercado inmobiliario que duplicó precios.
⚖️ Contraste de enfoques
- PSOE: considera que Ibiza sufre un modelo turístico elitista y excluyente, con desigualdad creciente y ausencia de vivienda asequible para la mayoría.
- PP: reivindica su gestión profesional, con medidas reales de control del turismo y mejora de servicios, orientadas al residente.
Ambas partes coinciden en la necesidad de diálogo, pero divergen radicalmente en su diagnóstico y propuestas para el futuro.
🗣️ Reflexión final
La disparidad de visiones entre los partidos refleja una Ibiza en tensión: un ámbito en plena transformación urbana y turística, donde se busca definir si el camino será inclusivo o seguirá favoreciendo a una minoría privilegiada. La tensión electoral se avecina, y gobierne quien gobierne, el acceso a la vivienda y el impacto del turismo siguen siendo preguntas pendientes.