Jesús también vota a favor de la reforma de la carretera de Santa Eulària pese a las duras recriminaciones

@C. Vidal / La cuarta y última consulta ciudadana impulsada por el Consell Insular de Eivissa sobre la carretera de Santa Eulària y el proyecto de desdoblamiento de la C-733 a su paso por Ca na Negreta realizada este jueves por la noche en el centro cultural de Jesús se saldó con 46 votos a favor y 12 en contra, en una reunión marcada por las duras recriminaciones de algunos de los vecinos del pueblo molestos por las obras en la travesía de Jesús.

Viviana de Sans, vicepresidenta del Consell, Pepa Marí, consellera de Territori i Mobilitat, y Toni Marí, jefe de carreteras del Consell, capearon el temporal como pudieron. «Queremos disculparnos por las molestias que pueden estar causando estas obras. Es comprensible el enfado por lo que afectan principalmente en el aspecto económico. También agradecemos la paciencia de los ciudadanos», declaró De Sans. «Lo bueno de una obra es cuando se termina. Son un calvario para todos e intentaremos agilizar el proceso. El hecho de encontrar restos arqueológicos supone que siempre existan retrasos, que intentaremos minimizar en lo posible», añadió, por su parte, Marí.

Los buenos deseos de la representante de Podemos y del PSOE, sin embargo, no acallaron las críticas. «Me siento engañada. Hablan de que les interesa la opinión de la gente y luego no hacen caso de las muchas alegaciones que se presentaron por la variante de Jesús», indicó una de las presentes en el turno de preguntas. «Espero que sean conscientes de lo que estamos sufriendo por estas obras y la urgencia de acabarlas cuanto antes», añadió otra mujer. «Con pedir disculpas no basta, porque las obras están paradas hace tiempo y es una vergüenza. Están haciendo mucho daño a los comercios de la zona y hay puestos de trabajo en juego», añadió un empresario de la zona.

Más directo fue un vecino de Jesús, que preguntó a De Sans y  que definiesen si «están a favor o no de la reforma de la carretera de Santa Eulària». Marí empezó a responder, pero el hombre la interrumpió asegurando que «sólo tienen que contestar sí o no, porque eso es lo que entiende el pueblo». «Sí», replicó la consellera de Mobilitat, mientras que De Sans argumentó que «es una obra importante y mi opinión es que salga adelante sólo si tiene el respaldo de la ciudadanía».

También, al igual que en la reunión de este miércoles en Santa Eulària, tomó la palabra el alcalde de la Villa de Río, Vicent Marí, para reiterar su crítica a un proceso consultivo que, en su opinión, «es una broma de mal gusto». «Hacer una encuesta para decidir si hay que hacer la carretera hace que nos sintamos estafados, porque parece que todo el trabajo anterior de un proyecto tan largo y  costoso y que ya estaba consensuado no sirve de nada», afirmó el alcalde.

«Los ciudadanos de Ibiza se merecen el derecho de que se les consulte y no hacer un ordeno y mando, como ha sido lo habitual hasta ahora. Aquí de lo que se habla es de saber lo que opina la gente, no si se va a hacer o no. Es un proyecto que está previsto llevarse a cabo, pero queremos tener el apoyo de la ciudadanía en una obra de esta envergadura», respondió la vicepresidenta del Consell Insular. Una vez finalizada la reunión, tanto Gloria Santiago, que saludó a Vicent Marí dándole «la enhorabuena por el mitin», como Viviana de Sans siguieron discutiendo con el alcalde.

De Sans: «Hay un apoyo mayoritario»
«Las cuatro reuniones -Consell de Eivissa, Sant Llorenç, Santa Eulària y Jesús- han sido en núcleos afectados directamente por las obras actuales y las previstas en la carretera de Santa Eulària. Hay un apoyo mayoritario a que la carretera tire hacia adelante. Ibiza es una isla muy pequeña y toda afectación de territorio de la envergadura de este proyecto tiene que pasar primero por ese proceso de información y, después, de consulta, para que la ciudadanía se sienta partícipe. Es algo importante y democráticamente hablando muy saludable, que no tendría que levantar las ampollas que levanta porque es un proyecto necesario pero, al mismo tiempo, de mucho impacto», comentó De Sans.

«La reunión de hoy ha sido dura, pero es que aquí se ha juntado con la travesía de Jesús. En Sant Llorenç también se juntó un poco con la carretera de Sant Joan. El tema de las carreteras siempre representan muchos inconvenientes para vecinos y el conjunto de la ciudadanía. En cuanto a la intervención del alcalde de Santa Eulària entiendo que hace su mitin y le agradezco el tono», añadió la vicepresidenta.

Marí: «La gente sí que quiere este proyecto»
Por su parte, Pepa Marí señaló que en estos procesos de información «hemos explicado a la gente el estado de esta carretera, porque en la anterior legislatura hubo mucha desinformación. También hemos puesto de manifiesto que nosotros queremos ser transparentes y queremos explicar las cosas a la gente el verdadero estado del proyecto. Además, el proceso de información sirve para saber qué piensa la gente y, después de estas cuatro jornadas, nos ha quedado bastante claro, pese a que las votaciones no son representativas o científicas, que una gran mayoría de gente está esperando esta obra como agua de mayo, que es la solución a problemas endémicos que afectan prácticamente a la mitad de la isla».

«En el remoto caso de que la gente estuviese en contra de este proyecto, cosa que se ha visto que no es así, nos replantearíamos el tema. Pero creo que ha quedado de manifiesto que la gente sí que quiere este proyecto. Además de ser consensuado en su momento por una labor ingente que hizo Albert Prats, este proceso de participación da voz y voto a la gente, que puede ver el proyecto como suyo. Eso es algo muy importante para llevarlo a término, porque unas obras de esta envergadura, como se ha visto en esta reunión, exigen mucha paciencia y comprensión por parte de todos los vecinos, además de provocar muchas molestias durante un período que no será corto», señaló Marí.

Una vez finalizado este proceso de información y consulta, el siguiente paso es realizar un estudio de opinión, con encuestas a pie de calle a unas 1.500 personas que, según De Sans, costará «6.000 euros». El tercer y último paso será realizar una encuesta/sondeo en línea a través del portal de participación. Todavía faltan algunos trámites por cumplir, como la aprobación definitiva del nuevo plan director sectorial de carreteras, y el grueso de las obras no empezarán hasta «dentro de dos o cuatro meses». El plazo de ejecución de todo el proyecto de la carretera de Santa Eulària, con un coste de cerca de 21 millones de euros, es de 18 meses. Hay tiempo más que de sobra para nuevas polémicas.