La abogada de ‘Xicu’ Ribas dice que ha sido «un cabeza de turco perfecto»

@Noudiari/ Han pasado 4 días desde que Francisco ‘Xicu’ Ribas, el policía local de Sant Josep que ha pasado 3 años en la cárcel esperando a ser juzgado por un crimen del que ha sido declarado no culpable, salió de prisión tras ser juzgado como autor de la muerte de Karina Rosales en 2012. Un caso que presenta todavía «muchas posibles líneas de investigación abiertas que hasta ahora no se habían seguido porque ya había un culpable», según ha explicado a Nou Diari, Alicia Hernando, la abogada de Xicu Ribas.

«Había más muestras de ADN de varón que no se cotejaron, llamadas telefónicas e incluso mi cliente tenía un sospechoso, pero no hicieron pruebas ni se siguieron esos caminos», apunta Hernando, que ha defendido a Ribas en este proceso judicial. Además, según remarca, «incluso había un hombre de Formentera con el que la fallecida había quedado el día que fue asesinada y no se investigó».

La abogada también ha dado detalles sobre las heridas que sufría la víctima, cortes que «por su trayectoria y la fuerza que presentaban en cada punto, necesariamente tienen que estar hechos por una persona zurda y Xicu es diestro».

Además, Hernando apunta a una persecución personal contra Ribas, porque, según critica, «aquí había personas que querían cerrar el caso rápidamente y apuntarse la medalla antes de la jubilación para compensar la cantidad de casos que quedan sin resolver».

La abogada de ‘Xicu’ Ribas insiste en que «por su perfil psicológico y por lo resignado y religioso que es, era el cabeza de turco perfecto».

3 meses para reincorporarse a la Policía

Tendrán que pasar todavía alrededor de tres meses para que Francisco Ribas, pueda reincirporarse a la plantilla de la policía donde ha prestado servicio durante casi 30 años, antes de que comenzara su periplo judicial.

Un momento que Ribas ya está esperando para ponerse trabajar, de hecho, aunque confía en que la Policía Judicial «ya está haciendo su trabajo para buscar al verdadero culpable», ha ofrecido su ayuda y colaboración para que se pueda cerrar el caso.

Ribas, que disfruta de su libertad desde el pasado viernes, se encuentra actualmente de baja psicológica, disfrutando de nuevo de su familia, amigos y conocidos a quienes agradece «todo su apoyo». Está deseando estar con su hijo, de 12 años, al que «le ha afectado mucho todo esto porque apenas nos hemos podido ver en dos ocasiones durante un momento». De momento, dice, tiene que arreglar papeles, «renovar carnets que se me han caducado en estos tres años, limpiar, ir a la playa…».

3 años en prisión

Tras 3 años en los que ha pasado por hasta 3 centros penitenciarios distintos, finalmente el pasado viernes, un tribunal del jurado lo declaró no culpable, poniendo punto y final a lo que él mismo denomina «una pesadilla».  En estos tres años, Ribas ha perdido unos 15 kilos y carga «con un pequeño estigma porque la gente me mirará y pensará que ese es el policía que ha estado en la cárcel», pero matiza que hasta el momento no se ha encontrado con muestras de desconfianza ni críticas: «mis amigos y compañeros me han recibido como siempre, en ese sentido no ha cambiado nada, por suerte, porque eso sí me hubiera afectado», reconoce Ribas.

Durante este tiempo no ha abandonado sus creencias religiosas, de hecho, del pecho cuelga un rosario, del que no se desprende. Ribas asegura que no guarda rencor a nadie, pero su abogada está estudiando si reclama algún tipo de indemnización o compensación por el tiempo que ha pasado en la cárcel y el daño que se ha hecho a su nombre.