El alcalde de Sant Antoni, Marcos Serra, defiende la necesidad de la variante de Sant Rafel propuesta por el Consell de Ibiza, así como los objetivos del nuevo planeamiento urbanístico en esta zona, que busca “recuperar el pueblo para los vecinos”.
Según Serra, el proyecto del PGOU para el pueblo «responde a dos problemas históricos de la localidad»: el tráfico rodado que atraviesa el casco urbano y la presencia de la zona industrial dentro del núcleo del pueblo. “Sant Rafel es un pueblo partido por la carretera. Los vecinos se merecen algo mejor: una plaza pública, aparcamientos y que el tráfico vaya por fuera”, afirmó el alcalde.
Es decir, el PGOU propone trasladar la zona industrial a las afueras del núcleo urbano, transformando el actual polígono en un espacio público con plaza, parques, aparcamientos y equipamientos educativos o deportivos.
Bajo estas líneas, el mapa del suelo urbano de Sant Rafel que contiene el nuevo PGOU:


Por otra parte, la llamada Alternativa 7 elaborada en coordinación con el Consell Insular de Ibiza, contempla la creación de una circunvalación que desvíe el tráfico, evitando que los vehículos atraviesen la avenida principal del pueblo. La solución elegida, conocida como Alternativa 7, incluye tres rotondas, una de ellas elevada sobre la carretera de Sant Antoni, y una vía de 1.117 metros con carriles para ciclistas y peatones.
“Si la circunvalación es una realidad, tendríamos un pueblo con menos tráfico, con su plaza y con la industria alejada del casco urbano”, señala Marcos Serra.
Sin embargo, la Alternativa 7 ha generado críticas entre vecinos que consideran el trazado “impactante y desmesurado” para un núcleo pequeño como Sant Rafel. La oposición del PSOE de Sant Antoni también ha reclamado un mayor diálogo con los vecinos y potenciales afectados.
El proyecto afecta a 47.489 metros cuadrados de suelo, en su mayoría rústico, y cuenta con un presupuesto de más de 21 millones de euros.

El alcalde ha aclarado que la rotonda elevada en la que termina el trazado, sobre la carretera de Sant Antoni, criticada por algunos vecinos y ecologistas por su alto impacto, es la solución «adecuada» porque de ese modo no hay que derribar viviendas: «permite esquivar viviendas y garantizar la seguridad vial. El espacio es limitado y no hay muchas opciones de circunvalación”.
Con este proyecto, Serra confía en conseguir un Sant Rafel más habitable, con menos tráfico y con espacios públicos y equipamientos para los vecinos, una visión que busca equilibrar desarrollo urbano y calidad de vida en el pueblo.
Variante desproporcionada y sobredimensionada que va a servir (si sigue adelante) para rellenar todo ese suelo rústico y urbanizarlo (pelotazo a la vista).
Otro gran agraciado es el Gala Night, cuyo suelo es rústico y que con esta propuesta pasaría a suelo hotelero!!! es decir le ha tocado el gordo!!
Un tercer premiado es el propietario del Big Mat cuyo suelo residencial pasaría automáticamente a suelo comercial, y oh sorpresa!! podría dejar el establecimiento allí (la tienda…porque el almacén no tiene cabida con esos camiones taponando la carretera principal).
Ay Marcos…te estás pasando!!! favor aquí favor allá….tengo curiosidad por encontrar más pelotazos…creo que en cada plano va a haber un mínimo de 2!