Si hay una zona que ha quedado terriblemente afectada por las lluvias torrenciales del martes, esta es la del frontal del puerto de Ibiza, junto al muelle de las barcas de Formentera y calles adyacentes del barrio de Es Pratet.
Mientras que los talleres y establecimientos de suministro naval que hay en la zona quedaron inoperativos y sufren grandes pérdidas por la entrada masiva de agua y barro, uno de los bloques de viviendas y locales comerciales más perjudicados ha sido el edificio Cabiro, que hace esquina entre la calle Diputat Josep Ribas y la avenida de Santa Eulària.
Durante el arco nocturno, trabajamos junto a los compañeros de @BombersdeMca y bomberos de #Ibiza 👨🚒
El equipo hace la fuerza 💪#Compromiso #Servicio #Humildad pic.twitter.com/BwodZiFRhr
— UME (@UMEgob) October 2, 2025
El garaje quedó anegado de agua y barro hasta la misma puerta, dejando coches sepultados y contadores de luz inoperativos. Esta pasada noche, efectivos de la UME y de Bomberos de Palma e Ibiza han estado achicando agua sin cesar porque se trata de un sótano enorme con toneladas y toneladas de agua estancada que no solo ha afectado a los vehículos sino también al suministro eléctrico.
El Cabiro es un gran edificio que hay frente a la estación marítima de Formentera, conocido por albergar la inmobiliaria Engel & Völkers Ibiza o las oficinas de Baleària y que el martes se convirtió no solo en ‘zona cero’ sino en el lugar donde se guarecieron un montón de personas que transitaban por la calle, muchos de ellos recién llegados a la isla en ferry. El amplio vestíbulo de este edificio, que conecta con varios portales interiores, sirvió para secarse y descansar a cubierto mientras las lluvia arreciaba y el exterior se convertía en un infierno.

“Venimos de Formentera y tenemos que ir al hotel Iberostar Puerto de Ibiza, pero de aquí no nos podemos mover”, explicaba David, un turista inglés que se tomaba las cosas con filosofía.
Lo cierto es que la imagen del edificio vista desde el mar, da una idea del volumen de agua que ha podido llegar hasta los sótanos.
