El Ayuntamiento de Ibiza aprobará este jueves en pleno un convenio con el Institut Balear de l’Energia (IBE) para instalar una planta solar fotovoltaica de autoconsumo colectivo en el aparcamiento municipal de Cas Serres, ubicado en la calle Felip Curtois i Valls, 219.
El proyecto contempla la instalación de pérgolas fotovoltaicas con una potencia pico de 113,27 kWp, que generarán aproximadamente 160 MWh anuales de energía renovable. Además de producir electricidad sostenible, las estructuras proporcionarán 775 m² de sombra para los vehículos, mejorando el confort y la funcionalidad del espacio público, y contribuyendo a reducir la temperatura ambiental.
La energía producida se distribuirá mediante un sistema de autoconsumo compartido, permitiendo que vecinos y Ayuntamiento se suscriban para beneficiarse de electricidad verde, reduciendo así el consumo de fuentes menos sostenibles.
El Consistorio cederá el terreno, mientras que el IBE asumirá los costes de instalación y mantenimiento, valorados en 265.000 euros, y gestionará la comercialización de la energía durante los próximos 25 años, ofreciendo un precio estable y asequible.
El regidor de Medio Ambiente, Jordi Grivé, destaca que este proyecto es “un paso importante hacia la transición energética, la reducción de la huella de carbono y el ahorro económico para el municipio y sus habitantes. Pasamos del discurso a los hechos con medidas concretas que avanzan hacia la ciudad moderna y sostenible que queremos”.