El IES Isidor Macabich une cocina, poesía y cultura japonesa en un proyecto educativo sobre el atún rojo

El IES Isidor Macabich ha celebrado este viernes un proyecto educativo centrado en el inicio de la temporada de pesca del atún rojo en Baleares, en una jornada que ha combinado formación culinaria, tradición japonesa, poesía y creación audiovisual. La actividad, protagonizada por el alumnado de Formación Profesional Básica de Cocina, ha incluido el despiece y preparación de un tarantelo de 8,9 kilos, la elaboración de un menú inspirado en la cocina nipona y la presentación de una Bento Box con sello poético balear.

Según han informado desde el centro, el proyecto forma parte del Programa Europeo de Movilidad KA121 en el marco de Euro FP Balears 8, y ha contado con la colaboración de varios departamentos del instituto, así como de la empresa Fuentes Atún Rojo, que ha donado la pieza de pescado y participado activamente en la formación del alumnado.

La jornada ha comenzado con una ponencia sobre los cortes tradicionales del atún rojo en la gastronomía japonesa, seguida de un taller práctico en el que el alumnado ha trabajado directamente con la pieza. Como cierre, han diseñado y elaborado una Bento Box con opción para llevar o degustar en el restaurante pedagógico del centro. El menú incluye tartar de atún rojo con aderezo japonés, sushi variado en estilo oshizushi, ensalada sunomono, una ensalada fusión balear-japonesa de algas y atún, y un postre de inspiración oriental.

La propuesta se ha completado con un enfoque artístico. El Departamento de Lengua y Literatura ha trabajado textos poéticos sobre el mar, incluyendo un poema del escritor ibicenco Marià Villangómez Llobet y un haiku original compuesto por el alumnado, ambos integrados en el diseño de la caja como homenaje a la pesca. Además, el Departamento de Imagen y Sonido ha documentado todo el proceso para su uso como recurso didáctico y difusión del trabajo interdisciplinar.

Desde el IES Isidor Macabich destacan que esta experiencia ha permitido al alumnado desarrollar competencias técnicas, culturales y creativas, así como promover el respeto por el producto local y su conexión con la cocina global. La actividad refuerza el compromiso del centro con una formación profesional innovadora, sostenible y abierta al mundo.