El STEI-i ha anunciado este lunes que impugnará el plan piloto de libre elección de lengua para el próximo curso escolar 2025-26 por medio de un recurso contencioso administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Baleares, y no descarta movilizaciones.
El sindicato recurrirá otra vez la convocatoria del plan para el curso que viene, como ya hizo el curso actual, con otro recurso que aún no ha sido resuelto, ha recordado en un comunicado.
El STEI alega que el plan piloto vulnera el artículo 4 del Estatuto de Autonomía y otras disposiciones legales como la Ley de normalización lingüística, que marcan como uno de los objetivos fundamentales del sistema educativo asegurar el conocimiento y la completa capacidad comunicativa en las dos lenguas oficiales.
Añaden que fomenta la segregación de los alumnos por motivo de lengua, una medida que la Ley de educación de las Islas Baleares no permite en ningún caso al hablar del modelo lingüístico escolar; además de ser «profundamente discriminador» al dotar de recursos adicionales sólo a los centros que se adhieran a él.
Por otra parte, ante las recientes exigencias de Vox al PP para alcanzar un acuerdo sobre los Presupuestos, de la derogación del Decreto de mínimos y la Ley de normalización lingüística, el STEI no descarta convocar movilizaciones en el sector educativo y advierte de que «hay líneas rojas que no se pueden pasar».
Por otro lado, el STEI ha expresado su rechazo a la intención del PP de derogar la Ley de Memoria histórica, una medida que considera «un ataque a las víctimas del franquismo, a los familiares y un incumplimiento flagrante de la normativa que prescribe la restitución, la dignidad y la memoria de todas las personas asesinadas durante la dictadura de Franco».
En relación con el recurso contra el plan piloto de lengua, el conseller de Educación y Universidades, Antoni Vera, ha manifestado su respeto a la libertad de lSTEI para ejercer sus derechos ante los tribunales, como ya hizo el curso 2024-25. Ha añadido que la Conselleria sigue trabando en ese plan, que funciona en todos los centros donde se ha implantado y se evaluará al final para «poder adoptar las decisiones pertinentes».
EFE