La Dirección General de Pesca ha establecido por primera vez una talla mínima próxima a la de la primera madurez, de 110 centímetros, para la pesca de musola (Mustelus mustelus), un tipo de tiburón de pequeño tamaño, con el objetivo de favorecer su conservación.
El conseller de Agricultura, Pesca y Medio Natural, Joan Simonet, ha destacado que es una medida pionera en Europa y que se ha adoptado de acuerdo con el sector pesquero profesiona, ha informado el departamento autonómico en un comunicado.
En la misma orden que establece la talla mínima legal para pescar musola, el Govern también incrementa la talla mínima para la pesca recreativa del verderol (Seriola dumerili) y el cabracho (Scorpaena scrofa) en las aguas interiores de Baleares.
La orden que establece las tallas mínimas para estas tres especies ya está en exposición pública.
En el caso de la musola, durante la primera reunión del Grupo de Expertos en Elasmobranquis de la Conselleria celebrada en septiembre de 2024, se acordó la conveniencia de establecer una talla mínima de captura de esta especie.
En los últimos años en el archipiélago se ha observado un incremento de las capturas de esta especie, especialmente de los juveniles y principalmente derivada de la pesca de arrastre, aunque el valor de mercado de los ejemplares más pequeños es escaso.
En cuanto a la talla mínima de pesca recreativa del verderol, se modifica la normativa vigente y se propone una talla mínima de captura permanente de 35 cm. Con estas dimensiones son menos vulnerables a esta modalidad de pesca.
Actualmente, entre el 1 de julio y el 15 de septiembre (en Menorca y Mallorca) y hasta el 30 de septiembre (en Ibiza y Formentera) la talla mínima de captura es de 30 cm; y fuera de estas fechas se permite la captura sin limitaciones de medida.
El verderol es una especie de crecimiento muy rápido, que durante el otoño puede pasar, en pocas semanas, de pesar 100 gramos (con 20 cm) a 470 gramos (con 35 cm).
También hay cambios en las capturas por persona y día una vez acabada la veda. Actualmente, se pueden capturar más de 50 individuos por persona y día. Con la nueva talla propuesta y con el objetivo de contribuir significativamente a la conservación de esta especie, esta cantidad se reduce a 11.
En cuanto al ‘cap-roig’ (cabracho), la especie tiene una talla mínima de captura para la pesca recreativa de 25 cm, pero la talla de primera madurez sexual de las hembras se sitúa en torno a los 29 cm. Esta diferencia implica que, con la regulación vigente, se pueden capturar ejemplares que todavía no se han reproducido y esto compromete la capacidad de renovación de las poblaciones.
Para favorecer la conservación de la especie y asegurar su reproducción antes de ser capturada, se propone incrementar la talla mínima de captura hasta los 30 cm.
EFE