@Noudiari/ Gent per Formentera (GxF) ha denunciado que desde que el Govern balear abrió su delegación en la pitiusa menor en abril del 2012, «el conjunto de gastos generados al erario público por esta oficina y su titular rondan los 300.000 euros, entre el coste del alquiler de local (descontada la parte del SOIB), gasto corriente y el sueldo del delegado más las correspondientes cargas sociales y sus viajes en Palma».
«Una de las funciones atribuidas por el Govern a esta delegación era la de Delegación de Educación. En el mismo periodo, la inversión en infraestructuras educativas del Govern de José Ramon Bauzá en Formentera ha sido de cero euros», ha denunciado la formación.
Según GxF, la consecuencia a día de hoy es que la nueva escuela de Sant Ferran «continúa sin tener partida presupuestaria». «Las únicas inversiones anunciadas en el Plan de Infraestructuras 2014 (retirada del fibrocemento en el colegio Mestre Lluís Andreu y barreras arquitectónicas a la IES Marc Ferrer) todavía no se han llevado a cabo», ha denunciado.
«Abandono de centros educativos»
«Esta no inversión en Formentera se suma al abandono de los centros educativos por parte de la Conselleria de Palma, hecho que ha comportado que tuviera que ser el Consell de Formentera quien corriera con unos gastos de inversión en los centros que correspondían en el Govern balear, además de las propias de mantenimiento, limpieza y gasto corriente», ha criticado.
GxF ha asegurado que por el contrario, el Consell de Formentera «ha mantenido su inversión anual de más de 90.000 euros en becas, ayudas al desplazamiento y reutilización de libros de texto». «En este último apartado el Govern ha pasado de una aportación anual de 70 euros por alumno de la última legislatura a los 17 actuales.
«El Govern de Bauzá ha reducido o cerrado programas de atención a la diversidad, ciclos formativos presenciales, y no ha convocado ayudas para el sostenimiento de las asociaciones de padres y madres de los centros», ha añadido la formación.
«La conflictividad y el desgaste para la comunidad educativa por la aplicación en un ámbito tan sensible de políticas imprudentes y no planificadas se ha traducido en un empeoramiento de las tasas de éxito escolar en las Islas Baleares, sin que Formentera haya sido una excepción. Este es el balance educativo en Formentera de cuatro años de Govern de Bauzá», concluye GxF.
