IbizaPreservation, Mallorca Preservation y Menorca Preservation están llevando a cabo conjuntamente un nuevo proyecto centrado en la identificación y el análisis de residuos hallados en el fondo marino en Baleares. El estudio forma parte de la iniciativa común de conservación marina ‘Tejiendo Futuro, Alianza para la Preservación de Baleares’, y cuenta con el respaldo científico del Instituto Español de Oceanografía (IEO).
Durante la primera fase, el proyecto ha permitido realizar muestreos submarinos en 20 estaciones en Baleares, seis de ellas distribuidas entre Ibiza y Formentera, gracias a la colaboración de varios centros de buceo y un total de 60 personas voluntarias de buceo recreativo en las cuatro islas, 42 de ellas en Pitiusas. Las estaciones de las Pitiusas han sido seleccionadas para representar distintos tipos de entorno: zonas situadas en reservas marinas con influencia urbana, áreas en espacios naturales vírgenes, y enclaves urbanos con fuerte impacto humano. Además, se han cubierto los cuatro puntos cardinales —norte, sur, este y oeste— para obtener una visión representativa del sublitoral, es decir, la parte del litoral marino que permanece siempre bajo el agua, desde el límite inferior de las mareas hasta donde desaparecen las algas, explican desde las entidades.
Por su parte, Mallorca Preservation y Menorca Preservation han desarrollado muestreos en 7 estaciones cada una, aplicando una metodología común. El objetivo del proyecto es obtener datos comparables y consistentes que permitan analizar la distribución y tipología de residuos marinos en aguas poco profundas y avanzar así en el conocimiento del impacto humano sobre el entorno costero.
“La franja submarina comprendida entre los 0 y 10 metros de profundidad está aún poco estudiada en cuanto a la afectación de residuos plásticos, a pesar de ser un área muy sensible”, explica Elisa Langley, responsable del estudio en Ibiza y coordinadora del Observatorio de Sostenibilidad de IbizaPreservation, quien destaca que “a través de esta metodología, se busca cubrir un vacío de información relevante para la mejora de la gestión de residuos y el diseño de acciones de sensibilización en el entorno marino”.
Cada centro de buceo participante realiza dos inmersiones por estación con grupos de buceadores recreativos voluntarios, siguiendo un protocolo común validado por el IEO. “La finalidad es conseguir suficientes, datos científicos e imágenes para elaborar un informe técnico que sirva de base para la toma de decisiones y la concienciación social”, señala Langley. La clasificación detallada de los residuos encontrados permitirá profundizar en el análisis del tipo de contaminación presente en el litoral balear. “Además de extraer residuos durante las inmersiones, los datos recogidos nos ayudarán a comprender mejor el problema y a contribuir a investigaciones a escala mediterránea”, añade.
En Ibiza, los centros colaboradores han sido Subfari (Portinatx, norte), Anfibios (Sa Xanga, en el Parque Natural de Ses Salines, sur), Aquadiving (Cala Martina, este) y Arenal Diving (S’Estanyol, bahía de Portmany, oeste). En Formentera, los muestreos se han realizado junto a Formentera Divers en Es Pujols (Punta Prima, este) y la bahía de Espalmador (reserva marina, oeste).
Cada estación ha contado con la participación de 8 personas por salida, quienes han realizado inmersiones en áreas de muestreo definidas (100 m² por pareja), registrando ubicación, profundidad, tipo de fondo y condiciones ambientales. Finalizado el trabajo de recogida de muestras, los equipos también realizaron tareas de limpieza en los alrededores. “Una vez terminado el muestreo, hemos hecho un barrido de la zona recogiendo residuos, aunque separados de la zona muestreada científicamente, con la misión de dejar esa ubicación en mejor estado del que la encontramos y aprovechar el material de buceo y la salida al máximo en beneficio de los ecosistemas marinos”, indica Langley.
Entre los residuos hallados se encuentran toallitas, envoltorios plásticos, vasos, gafas de sol, botellas de yogur, garrafas, restos de tuberías, cabos náuticos, bolsas, madera de embarcaciones, un saco de rafia, un váter e incluso un ancla, estos dos últimos demasiado pesados para ser retirados en el momento. “Cuando localizamos residuos de gran tamaño, los equipos registran su ubicación exacta para que puedan ser retirados posteriormente con medios adecuados”, concluye la coordinadora del Observatorio de Sostenibilidad de IbizaPreservation.
Desde las entidades de Ibiza y Formentera, Mallorca y Menorca insisten en destacar que esta acción conjunta no sólo permite retirar residuos del entorno marino, sino también “avanzar hacia una comprensión más precisa del impacto humano sobre los ecosistemas costeros, fomentando la implicación ciudadana a través de la ciencia participativa”.
“Tejiendo Futuro: una Alianza para la Preservación de Baleares”, es un proyecto impulsado por IbizaPreservation, Mallorca Preservation y Menorca Preservation centrado en abordar la contaminación plástica en las Islas Baleares desde tres líneas de acción: la investigación científica, el impulso de la economía circular y la concienciación ciudadana. La iniciativa, de un año de duración, cuenta con financiación de Depeche Mode y la marca suiza de relojes Hublot, canalizados a través de Conservation Collective, la red global de fundaciones de la cual las tres entidades forman parte.