«La niña está bien y nos sentimos orgullosos de lo que hemos hecho»

@L.Aversa/El alcalde de Vila, Rafa Ruiz, ha recibido esta mañana a los agentes Eva Yepes y Salvador Barber, que el miércoles salvaron la vida a un niña de dos años y medio que estuvo punto de ahogarse atragantada con una galleta.

«Todos los días trabajan, todos los días tienen problemas, pero hay días que son especiales. Ayer salvaron la vida de una niña en circunstancias especiales y en una situación de tensión máxima. Trabajaron con una profesionalidad que debe reconocerse», ha señalado el primer edil.

Los agentes, Salvador Barber, con 22 años de antigüedad en la Policía Local de Ibiza, y Eva Yepes, con sólo dos años como policía local, todos de servicio en Vila, han detallado la situación que vivieron en torno a las once de la mañana del miércoles en el barrio de sa Penya, cuando apareció un hombre «desencajado» con una niña en brazos que no respiraba.

«Tuvimos una actuación que fue un poco comprometida. Nos salió bien porque pudimos hacerle la reanimación a la niña», ha relatado Barber, que ha explicado que la intervención se hizo en un momento de mucha tensión, porque en unos segundos la calle se llenó de familiares que «estaban fuera de sí» y que «estaban más preocupados en que viniera la ambulancia» para hacer el trabajo que los agentes estaban realizando.

Maniobra de reanimación
«Conseguimos recuperar a la niña en poco tiempo y fue importante. La niña no ha tenido secuelas, la niña está bien y nos sentimos orgullosos de lo que hemos hecho», ha explicado el agente.

Barber ha detallado que cuando se encontraron al hombre en la calle Racó de sa Murada, la niña tenía los labios morados, los ojos en blanco, y tenía pulso pero no respiraba.

Rápidamente la pusieron en una posición ‘decúbito prono’ (tendida boca abajo y con la cabeza de lado), y comenzaron con las maniobras de reanimación. «Vimos que no respiraba pero tenía pulso. Provocamos el vómito y la niña reaccionó. Empezó a respirar y procedimos con el protocolo de reanimación», ha añadido el agente, que ha explicado que «la ambulancia fue muy rápida» y que una vez que la pequeña se recuperó, terminó la tensión de los familiares, que reclamaban que los agentes llevaran a la pequeña al hospital en el vehículo policial.

Mientras que Barber, en sus años de servicio, ya ha vivido alguna situación similar, para Yepes fue la primera vez.

«A nosotros nos entrenan para hacer las primeras actuaciones. Normalmente solemos llegar antes porque estamos en la calle, y en realidad fue natural porque habíamos practicado. Nosotros actuamos de forma muy natural, muy rápido, y la verdad que estamos contentos porque salió todo bien», ha destacado Yepes.

Barber ha añadido que el alimento que extrajeron a la pequeña pudo ser una galleta, ya que, según el abuelo, es lo que había estado comiendo.

La niña se llama Lucía y se recupera en el hospital.