@Noudiari / Los dos yates que ardieron en Caló des Moro la semana pasada obligaron a cerrar la playa a los bañistas, que están utilizando una peligrosa zona sin balizar y sin socorrista conocida como ses Roquetes.
Este punto de la costa de Sant Antoni posee un acceso para embarcaciones cuya barrera de contención permanece destrozada sobre las rocas. Pese a la señal que indica que está prohibido el baño, las personas que hacen caso omiso se cuentan por decenas y los resbalones son una tónica habitual durante estos días en la rampa que da acceso al mar.
Esta no es la única infracción que se puede ver en Caló des Moro. No en vano, también son varias las embarcaciones que este jueves han aparecido de madrugada fondeadas sobre posidonia oceánica pese a que tienen a su disposición un gran bancal de arena próximo para hacerlo.
Donde no se puede bañar, es en la zona de la rampa, pero todo lo otro (zona de arena que se ve en la foto casi hasta la cueva de las langostas) es una zona de baño y balizada de prácticamente 500×50 metros.