Los hogares formados por dos personas son ya la forma de convivencia más habitual en Baleares. Según la última Estadística Continua de Población del Instituto Nacional de Estadística (INE), en el archipiélago hay 466.483 hogares, de los cuales 127.671 (27,3 %) están integrados por dos miembros.
Este tipo de hogar supera ligeramente al de cuatro o más ocupantes, que representa el 26,3 % del total, seguido de los hogares unipersonales (25,7 %) y los de tres personas (20,5 %).
En el conjunto de España, esta misma tendencia se mantiene: los hogares de dos personas son los más numerosos desde principios de siglo, aunque los datos actuales muestran un claro aumento de quienes viven solos, que ya representan el 28 % del total.
La socióloga María José Rodríguez explica que este fenómeno puede deberse a varios factores: desde la salida de los hijos del hogar familiar, hasta decisiones personales como la infecundidad voluntaria, es decir, parejas que optan por no tener descendencia. Además, recuerda que “no todas las personas que viven en una misma vivienda constituyen una familia”, subrayando la creciente diversidad de estructuras de convivencia.
Baleares, entre las comunidades donde predomina el modelo de pareja
En regiones como Baleares, Andalucía, Cataluña, Comunidad Valenciana y Madrid, el hogar tipo está compuesto por dos personas. En cambio, en once comunidades autónomas —entre ellas Aragón, Canarias, Galicia o Castilla y León— vivir solo es la opción más común.
Los hogares con tres miembros siguen siendo el modelo menos frecuente en toda España. Según la socióloga Sandra F. Corbella, esto se debe a que muchas de estas viviendas corresponden a familias jóvenes con un solo hijo y, por tanto, “estructuras en transición” que cambiarán con el tiempo.
Hogares más grandes en territorios con población joven
En Murcia, Ceuta y Melilla, el patrón es distinto. Allí, los hogares más comunes son los de cuatro o más personas, debido a factores como la mayor proporción de población joven, una mayor natalidad y distintos estilos de vida familiares, que incluyen una mayor presencia de familias inmigrantes.
Finalmente, el INE también anticipa que el tamaño medio de los hogares seguirá bajando en los próximos años, y que los hogares unipersonales seguirán en ascenso, marcando un cambio estructural en la forma de convivir de la sociedad española.
EFE