El atleta del momento, Adrián Guirado, que ha corrido como independiente, se ha impuesto con relativa facilidad en la Pujada a la Catedral de este año, en la que han tomado parte unos 450 atletas. Ha parado el crono en 7’18» y no ha tenido rival. Desde la salida ha tomado la cabeza de la carrera y en el Portal de ses Taules ha cambiado el ritmo para dejar atrás a sus adversarios. El atleta del Pitiús Toni Tugores, segundo clasificado (7’34») y ganador de la carrera del año pasado y el anterior, no ha podido seguir la marcha del vencedor y en esta ocasión ha tenido que conformarse con una meritoria segunda posición. Eduardo Chordá, del Runtriton, ha ocupado la tercera plaza del podio.
Como cada año, la carrera que cierra el calendario atlético pitiuso ha contado con una numerosa participación y se ha desarrollado bajo un ambiente más festivo que competitivo. No han faltado los disfraces y ha sorprendido el concurso de un tren de cartón conducido por varios atletas, una de las sensaciones de la prueba tanto por la originalidad como por la pericia de los corredores para acompasar el paso.
En categoría femenina, el triunfo ha sido para la también atleta del Pitiús Alexia Hartman, con un registro de 8’42», quien tras su llegada ha explicado que «es una carrera muy dura pero a la vez muy divertida. He estado entrenando cuestas y me ha ido francamente bien. La Pujada es una prueba diferente, porque no hay presión y se corre muy a gusto».
Al término de la prueba, Guirado comentó estar «feliz» por la victoria, «la primera en esta carrera, que es realmente muy bonita». El atleta contó cómo había ido la competición: «He salido delante y me han seguido muy de cerca hasta es Portal de ses Taules, que he dado un tirón a ver si me escapaba y como he visto que no me seguían he apretado y me he marchado en solitario hasta el final».
