El fútbol volvió a demostrar su imprevisibilidad en Can Misses. Una semana después de ganar en Murcia (0-2) en el último partido con Paco Jémez al frente del conjunto, la UD Ibiza ha caído este domingo en casa ante el Teruel (0-1) en el estreno de Miguel Álvarez en el banquillo celeste.
El encuentro tuvo un arranque igualado, con poco ritmo y escasas llegadas a las áreas. Los dos equipos se mostraron más preocupados por no cometer errores que por buscar con decisión la portería rival. La primera mitad transcurrió sin sobresaltos, con apenas algunas aproximaciones sin peligro y sin ocasiones claras que animaran a la grada de Can Misses.
La segunda parte siguió un guion similar: control, imprecisiones y juego espeso por parte de ambos conjuntos. Parecía que el empate a cero era el destino inevitable de un duelo sin brillo ni alternativas. Sin embargo, el fútbol castiga los despistes y premia la insistencia.
En el minuto 71, un penalti tan innecesario como decisivo cambió el signo del partido. Blesa, desde los once metros, batió al guardameta ibicenco y puso por delante al Teruel, que defendió con orden su renta hasta el final. Lo intentó la UD Ibiza en los minutos finales del choque, pero no tuvo suerte ni demasiadas ideas como para llegar con peligro a las inmediaciones del marco contrario.
El debut de Miguel Álvarez, por tanto, no tuvo el desenlace esperado para la afición celeste, que vio cómo los suyos se quedaban sin premio en un choque que parecía abocado al empate. La UD Ibiza deberá reaccionar cuanto antes para no perder el paso en una categoría donde cada punto cuenta y más si quiere luchar por las primeras posiciones y clasificarse para el play-off de ascenso.
Hace pocas semanas, la afición celeste soñaba con conquistar la primera posición, que va asociada al ascenso directo a Segunda División, ahora, sin embargo, aspira a poder luchar por una de las plazas del play-off.
Cambio radical de planes en un principio de temporada convulso para el club insular, que cuenta con una plantilla y un presupuesto de garantías para alcanzar cotas mucho más altas.






