Grande-Marlaska asegura que Interior trabaja para frenar la llegada de pateras a Formentera

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, afirmó ayer en el Senado que «se está trabajando de una forma decidida” en las Balears y en Argelia, «el origen principal de las entradas irregulares», para frenar las oleadas migratorias que afecten principalmente Formentera. El ministro respondía así a la intervención del senador de Ibiza y Formentera, Juanjo Ferrer, quien reclamó más recursos para las islas, «ante el incremento de llegada de pateras a través la ruta argelina«.

Ferrer intervino ayer durante la comparecencia del ministro de Interior ante el Senado para dar cuentas sobre la gestión migratoria -principalmente en las Islas Canarias- después de la suspensión temporal de la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas (Frontex). El senador destacó que este año se está incrementando la llegada de personas migrantes a Formentera – ya son más de 60 contabilizadas-, por lo cual «la carencia de infraestructuras y la infradotación policial son un grave problema», afirmó.

Ferrer explicó que la mayoría de las pateras que hacen la ruta argelina no se interceptan en el mar, sino que llega a producirse un desembarco en Formentera.

Las personas que viajan en estas embarcaciones son trasladadas a Ibiza y, posteriormente, puestas en libertad, puesto que las Pitiusas no cuentan con ningún centro de internamiento.

Entonces, se suelen marchar hacia la Península y, desde allá, hacia otros destinos de Europa.

En este sentido, el senador criticó duramente las recientes declaraciones del inspector en jefe de la Brigada de Extranjería de la Policía Nacional en las Baleares, José María Manso, quién afirmó en una entrevista en el diario Última Hora que la mayoría de inmigrantes que se quedan en las islas delinquen. Ferrer insistió que estas afirmaciones no se basan en ningún dato.

Problemática de la vivienda

Por otro lado, Juanjo Ferrer intervino ayer para rechazar una propuesta del Partido Popular «que pretende criminalizar la ocupación de viviendas».

Ferrer recordó, por un lado, que la falta de vivienda a precios asequibles está muchas veces detrás esta problemática y, por otra parte, explicó que no hay datos que avalen un incremento de las ocupaciones, y menos de viviendas particulares (en la mayoría de los casos afectan pisos vacíos gestionados por entidades bancarias y fondos de inversión).

Por este motivo, el senador pidió que la problemática se aborde desde tres ejes de actuación: la creación de vivienda social, la colaboración público-privada para la gestión de pisos vacíos por parte de grandes tenedores y evitar la polarización política del fenómeno de la ocupación.