La Asociación de Vendedores del mercado de Sant Joan ha denunciado hoy a través de un comunicado que una treintena de vendedores veteranos se ha quedado fuera del mercadillo, que reabrirá sus puertas el próximo domingo 20 de agosto tras permanecer cerrrado desde octubre de 2022.
«El pasado día 7 de agosto se publicaron las listas denitivas de admitidos para la reapertura del mercadillo de Sant Joan. El jarro de agua fría fue para treinta antiguos participantes, que se han visto fuera de estas listas o en las listas de reserva», afirman desde la asociación.
Esta exclusión se debe, afirman, «a los injustos baremos baremos establecidos por las nuevas bases».
Así, explican que la antigüedad tenía el mínimo reconocimiento, con 10 puntos sobre 100 totales, mientras que otros aspectos tenían una valoración mucho más alta. «Se daban hasta 40 puntos del baremo de la memoria del producto», explican, «una valoración totalmente subjetiva realizada por la propia concejala y su equipo y que es la que mayores discrepancias ha provocado».
«En general, la resolución definitiva está plagada de puntuaciones erróneas, puntos no sumados, cambios arbitrarios en la categoría solicitada y que afectan negativamente a muchos vendedores y que tendrían que haber sido corregidos, obviamente antes de anunciar la apertura y de hacer el sorteo de puestos que se realizó este pasado domingo», añaden.
Para los afectos es «inconcebible que se siga el proceso sin tener las deciencias subsanadas y las listas reajustadas».
La perplejidad de los vendedores es «mayúscula», dicen después de leer las declaraciones de la propia concejala, «en las que asegura que el procedimiento ha sido fruto del acuerdo y consenso entre ellos, los vecinos e incluso la oposición, y que además la propia alcaldesa manifestara el viernes que las bases son equilibradas y sensatas para evitar conflictos internos«.
Esta «injusta situación» aboca a muchas familias «a un desastre en sus economías ya mermadas, después de casi 11 meses desde el cierre inesperado, que se produjo por la lentitud en solucionar un problema que el propio ayuntamiento había generado, al no haber tramitado las licencias municipales de ese mismo año», añaden.
Afirman, además que, tras conocer el contenido de la lista de admitidos «unos cuarenta vendedores afectados y no afectados se presentaron de manera espontánea a primera hora en el ayuntamiento para tratar de conseguir una reunión en la que poder aclarar todo este asunto y que antes de que el domingo se realizara el sorteo de puestos ya anunciado».
Allí «fueron recibidos por la concejala de mercados, Carmen Rodríguez, el teniente de alcalde Andreu Roig y Saigo, nuevo organizador del mercado».
En el salón de plenos, los vendedores «pudieron exponer su enorme preocupación por las deficiencias e injusticias apreciadas en las listas denitivas».
«La concejala se comprometió a consultar con la abogada del ayuntamiento y llamar el viernes a los afectados. Llamada que se produjo instando a que los vendedores presentaran por escrito sus quejas y peticiones y el lunes mismo habría una respuesta firme», afirman.
En dicho escrito, los mercaderes «aportaron posibles soluciones, como que el ayuntamiento analice la posible ampliación de las plazas del mercado» o que se implemente «un sistema de rotaciones similar al que se puso en práctica durante la pandemia».
«Para sorpresa de todos, poco después de esta llamada, se anunciaba a bombo y platillo la reapertura sin haber resuelto antes toda escabrosa situación que afecta a la vida de 30 personas», denuncian en su escrito.
La Asociación de Vendedores del mercado de Sant Joan se formó el año pasado, unos meses antes de la clausura del mercado, «por el desamparo que sentían los mercaderes ante el consistorio y la anterior asociación organizadora del mercado, por una gestión plagada de irregularidades y desatinos», acusan.
Añande que durante estos meses de cierre, desde la asociación han ofrecido al ayuntamiento «su colaboración desinteresada para tratar de acelerar la reapertura y siempre defendiendo que se respetase a la gente que llevaba muchos años construyendo, levantando dando vida y manteniendo el mercado».
Y así es hijos míos, como la gaviota hace su nido.
Alevosía, premeditación y amiguetes. Para que los que realmente levantaron el mercado, sé tengan que ir con una mano delante y otra detrás, un clásico.
La gaviota carroñera, por donde pasa, todo lo adúltera..
estos debían ser los enchufados de antes.
Se acabó la tranquilidad en Sant Joan los domingos.
No entiendo como, por una parte el ayuntamiento y por otra esta supuesta «asociación de comerciantes» unos por su ineptitud, ningún miembro de la actual corporación ,tiene la más mínima idea de lo que significa un verdadero programa y acciones de dinamización de una zona o región, y otros por su descaro, que se atribuyen unos derechos que ellos mismos se otorgan.
Puedo garantizar que faltan a la verdad con afirmaciones como que las decisiones han sido tomadas con la participación de los vecinos y el único estilo que conocen es el de «yo mando y actuo…por la gracia de D….
Finalmente se nuevo aparece Saigo, el cual ha demostrado sobradamente en etapas interiores lo que realmente es, un vividor que no ha hecho nada mas que vivir del cuento viviendo en una nube de colores y el lema de Love & Peace … ya seria hora de despertar y afrontar la nueva realidad y simplemente buscar un trabajo y devolverle a la sociedad algo de lo le ha dado. Con ejemplos como este la juventud no tiene provenir.. o si, perdon se me habia olvidado pueden llegar a ser Influencers….
Lo más paradójico es que de la asociación de vendedores de Sant Joan, ni 1/4 parte de los miembros debe estar empadronado en Sant Joan… Teniendo en cuenta que el mercadillo de Sant Joan solo se celebra 1 día por semana, mucho debe cundir económicamente para que se quejen por no estar dentro cuando la mayoría está en otros mercadillos de la isla (ironía)