La Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural ha liberado este viernes en la playa de Es Cavallet de Ibiza 74 tortugas marinas (Caretta caretta) nacidas durante el verano pasado en la isla.

Según ha informado el Govern balear en un comunicado, del total de ejemplares devueltos al mar, 20 llevarán un emisor satelital para hacer el seguimiento y conocer mejor su comportamiento, en el marco del proyecto que lleva a cabo la Fundación Oceanográfico a través de la Fundación Biodiversidad y dentro de las acciones del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

Durante el acto, la directora general de Medio Natural y Gestión Forestal, Anna Torres, ha incidido en que la población debe “tomar conciencia” de que estos episodios de nidificación y llegada de tortugas marinas “se continuarán repitiendo” durante los próximos años en todo el archipiélago balear.

En esta línea, Torres ha remarcado que el cambio climático ha modificado el comportamiento de estos ejemplares que se suelen reproducir en el Mediterráneo oriental, pero que “desde principios del siglo XXI se ha detectado su reproducción en el Mediterráneo occidental”.

Desde el Govern han recordado que la temporada pasada empezó con dos nidos detectados en Mallorca, los primeros casos en esta isla, y que poco después se registraron tres casos de nidificación en Ibiza, que ya había tenido nidos en años anteriores.

El primero del verano pasado fue el 10 de julio, en la playa de Es Figueral, cuando se dio el aviso de una tortuga haciendo una puesta durante el día. Dado que fue un nido peculiar, en el que solo había una quincena de huevos, se decidió llevar toda la puesta a incubación artificial al Laboratorio de Investigaciones Marinas y Acuicultura del Instituto de Investigación y Formación Agroalimentaria y Pesquera (IRFAP-LIMIA), ubicado en el Puerto de Andratx, donde nacieron siete ejemplares el 27 de agosto.

Al día siguiente de la primera tortuga, el 11 de julio se detectó un segundo ejemplar haciendo una puesta en la playa de Santa Eulària, con 92 huevos.

Diez de estos huevos se llevaron a incubación artificial a las instalaciones del IRFAP-LIMIA y los 82 restantes se trasladaron a la playa de Es Cavallet, ya que el nido original estaba situado entre hamacas y la temperatura y humedad de la arena no eran adecuadas.

Para movilizar estos huevos se imitó al máximo el nido original en la playa de Es Cavallet, dentro del Parque Natural de Ses Salines, y se construyó un recinto para protegerlos y vigilarlos.

A finales de agosto nacieron dos tortugas en incubación artificial y 28 crías de los huevos que se incubaban en la playa.

El 19 de julio se detectó una tercera puesta en Ibiza, en la playa de Ses Salines, de 117 huevos, de los que 19 se llevaron a incubación artificial y el resto se trasladaron al mismo recinto de la playa de Es Cavallet.

A principios de septiembre, un fuerte temporal amenazó la viabilidad del nido, pero el esfuerzo del equipo técnico y de los voluntarios permitió que acabaran naciendo 57 tortugas de los huevos de la playa, mientras que en la incubadora nacieron 13.

Algunas de estas tortugas nacidas en Ibiza se liberaron al mar con un mes de vida, y el resto, 75 ejemplares de los tres nidos, pasaron a formar parte del programa Head-Starting, que consiste en criar las tortugas durante 10 y 12 meses en un medio artificial controlado, en los que son alimentadas simulando los cambios que experimentarían en la naturaleza, aumentando así su posibilidad de supervivencia.

Este viernes, 74 de estos ejemplares se han liberado en su hábitat natural.

EFE