¿Qué gallina visitaría a un león?, por Joan Miquel Perpinyà

Vemos en Instagram una foto del candidato a la alcaldía de Sant Antoni por el PSOE, Antonio Lorenzo, junto a Pepe Roselló. A la imagen le acompaña este texto: “Las empresas locales son uno de los mayores activos de nuestro municipio. Gracias, Pepe, por la larga, interesante y variada conversación que hemos tenido esta mañana. #SantAntoni necesita políticas valientes para avanzar y una apuesta por la cultura para recuperar su esencia turística. Es decir, diálogo y consenso entre los representantes públicos y todas las voces de una sociedad plural como la nuestra”.

El candidato socialista no deja de desconcertar a propios y extraños, porque tan pronto alaba a las empresas locales y dice que son “los mayores activos” del municipio, como critica que sean contratadas por el Ayuntamiento, porque preferirá que los trabajos los hagan empresas de Vila.

Al margen de que no se comprende qué sabe del mundo empresarial un candidato que en su vida apenas ha trabajado unos pocos meses de monitor de atletismo y otros pocos sirviendo batidos y yogures helados. La escasa sustancia de su paupérrima vida laboral está en el sector público gracias al carné del PSOE, como asesor de los consellers ibicencos del Govern balear en Palma. Ya me dirán…

Por otro lado, es enternecedor ver a un cachorro socialista a medio cocer junto a un tiranosaurio con un currículum tan extenso como profundo, en un sector como el ocio nocturno que el PSOE dice querer combatir. Esta aproximación a los empresarios del West End, contra los que los socialistas presumen haber combatido con todas las armas posibles y que a menudo son señalados como los poderosos que auténticamente mandan en Portmany, los principales y directos beneficiarios del turismo de excesos, por lo que malamente podrán nunca aceptar medidas que pretendan su erradicación, sólo puede entenderse como un traspiés fruto de la bisoñez y de una candidez extrema.

Ninguna gallina iría a visitar a un león, a menos que sea tan inconsciente de desconocer su condición gallinácea y, lo que es peor, la naturaleza de este gran felino, rey de los depredadores, que se la zamparía de un bocado sin la menor dificultad. Pero ahí tenemos a Antonio Lorenzo, junto a Pepe Roselló, posando feliz. Pero si contemplan la foto con detalle, más feliz se muestra el león, más sonriente, bien agarrado al joven e inexperto político, al que ya debe considerar su almuerzo, de ahí que se le vea relamiéndose lascivo.

Me pregunto si Pepe Roselló informó al joven candidato socialista a alcalde de Sant Antoni de que el pasado fin de semana estuvieron en Ibiza los reporteros de ‘Equipo de Investigación’ de LaSexta, el programa de Gloria Serra que no se caracteriza por hablar bien de los lugares que visitan, sino por sacar lo peor que son capaces de encontrar, a menudo de forma demagógica y poco ética, con cámaras ocultas si hace falta. Pepe Roselló estuvo con ellos y en poco tiempo sabremos qué les dijo a los investigadores de LaSexta. 

Hay que tener la cara muy dura para criticar los openings ahora, cuando durante años los estuvo celebrando en el aparcamiento del Space, sin mostrar el menor respeto por los derechos de los vecinos ni por las normas legales, para venir ahora a criticar lo que hacen las discotecas. Con este personaje se reúne Antonio Lorenzo y a este dedica alabanzas. Recuérdenlo cuando oigan al alcaldable socialista sus habituales peroratas sobre cambiar el modelo turístico de Sant Antoni. ¿De la mano de Pepe Roselló y los empresarios del West End, convertidos ahora en “los mayores activos” del municipio? ¡Menudo cinismo!