El Partido Socialista ha lanzado una dura crítica contra la nueva ley urbanística impulsada por el PP y Vox en Baleares, calificándola como una “ley bomba de especulación urbanística” que, según advierten, podría provocar “la peor ola de destrucción del territorio en Ibiza en más de veinte años”.
La portavoz del PSOE en el Consell Insular de Ibiza, Elena López Bonet, ha alertado de las graves consecuencias que esta normativa podría tener sobre el territorio, el paisaje y el modelo de desarrollo sostenible de la isla. Según López, la ley abre la puerta a la construcción masiva en suelo rústico, comprometiendo seriamente el equilibrio ambiental y social del territorio.
“Lejos de resolver el problema del acceso a la vivienda, esta norma tiene como único objetivo favorecer una nueva oleada de especulación urbanística sin precedentes”, ha denunciado la portavoz socialista. “Tira por tierra años de planificación territorial y amenaza directamente el futuro de la isla”.
El PSOE acusa al Consell Insular de Ibiza de actuar como cómplice de esta normativa, al no oponerse frontalmente a la misma. En lugar de rechazarla, señalan, “intenta maquillar sus efectos presentando enmiendas que no modifican su carácter destructivo”. En este sentido, los socialistas consideran que el propio presidente del Consell, Vicent Marí, “reconoce implícitamente los peligros de la ley al tratar de suavizar sus consecuencias”.
Para el PSOE, este intento de modificación parcial constituye “un enorme engaño” que no oculta la realidad de una norma que permitirá la edificación incluso en zonas rústicas de alto valor ambiental o afectadas por riesgos naturales, como inundaciones. Además, advierten que podría reactivar sectores urbanizables obsoletos que el Plan Territorial Insular (PTI) había suspendido o previsto desclasificar.
El partido exige la retirada inmediata de lo que califica como una “ley bomba de especulación urbanística” y hace un llamamiento a la sociedad ibicenca para que se movilice en defensa del territorio. “Construir en suelo rústico no es la solución al problema de la vivienda, sino una excusa para continuar destruyendo la isla”, ha afirmado López Bonet.
“El futuro de Ibiza debe basarse en un modelo equilibrado y respetuoso con el territorio, con políticas de vivienda destinadas a la ciudadanía, no al servicio de los intereses urbanísticos de siempre”, ha concluido la portavoz socialista.